Desde el 31 de diciembre los coches piratas que sean identificados en cualquier provincia andaluza podrán ser inmovilizados por Policías locales y Guardia Civil hasta que el dueño del vehículo no paguen la sanción correspondiente.
Los profesionales continúan felicitándose por el nuevo decreto, pues era una petición histórica del sector. Fue el pasado 23 de diciembre cuando finalmente el Consejo de Gobierno aprobó la norma con el fin de reforzar el control contra el intrusismo en el sector del taxi.
Otra de las novedades es que los gastos originados por el depósito del vehículo correrán a cargo de la persona infractora y, con el fin de proteger al usuario, el decreto establece que será responsabilidad del denunciado buscar los medios alternativos necesarios para que los viajeros lleguen a su destino. De no hacerlo, dichos medios podrán ser establecidos por la Administración, si bien los gastos serán en todo caso de cuenta del denunciado.
Hasta la instauración de esta modificación el propietario del coche pirata recibía la notificación de la apertura del expediente por la infracción, pero podía seguir circulando con su vehículo y continuar con esa actividad económica ilegal.