60 taxistas de Santa Cruz de Tenerife empezarán a cobrar en poco más de un mes 40.000 euros por el cese de su actividad. Tendrán prioridad para acogerse a este plan profesionales con alguna discapacidad o que estén próximos a jubilarse y aquellas viudas que tengan a su cargo alguna licencia.
Todos los interesados deberán acreditar con papeles su situación personal, pues para la retirada de licencias se dará prioridad a taxistas con alguna discapacidad que les impida desarrollar su trabajo, a aquellos que estén próximos a jubilarse o a viudas con licencias en activo, según se explica en el convenio suscrito por el Ayuntamiento de la capital y el Cabildo.
En las bases de la convocatoria del plan de cese de actividad también se detalla que el pago por la licencia se realizará en tres anualidades. Todos aquellos taxistas que se acoja a este rescate y tengan a su cargo a asalariados deberán arreglar su situación, cesándoles también de la actividad. Así se explicará la próxima semana en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), una vez se apruebe por mero trámite en la Comisión de Control que el Ayuntamiento llevará a cabo.
La Mesa Patronaldel taxi daba el visto bueno, en una reunión mantenida esta semana, a todos estos puntos. Sin bien Juan Antonio Reyes, secretario de la Mesa, aclaraba a Diario de Avisos que esta medida “es insuficiente, pero muy necesaria”. Piensa que todavía quedarían muchas licencias pendientes de eliminarse pero que de momento “esta es una buena solución que hay que aceptar para empezar a trabajar”.
Según confirmaba Reyes al mismo diario, “ya hay más de 40 dispuestos a acogerse a esta primera fase”, y más de 300 en total que quieren entregar la licencia aunque “muchos, al no estar al día con los pagos a la Seguridad Social, aún no podrán acceder a este convenio”.