En respuesta a la pérdida progresiva de clientes, el taxi de Málaga pide que se efectúe el rescate de más de 200 permisos a través de un plan a cuatro años. De los 1.434 vehículos que conforman la flota, y siguiendo a pies juntillas la ordenanza municipal, sobrarían 79 licencias para ajustarse a la ratio de 2,35 licencias por cada mil habitantes.
La Asociación Unificadade Autónomos del Taxi (Aumat) y la cooperativa Taxiunión coinciden en la necesidad de adelgazar el parque móvil quitando de la circulación más de 200 licencias en los próximos cuatro años. Aunque la ordenanza municipal fija un máximo de 2,35 vehículos de auto taxi por cada mil habitantes (hecho que supondría retirar 79 coches), la realidad es que al gremio le parece insuficiente.
Para el representante de Aumat, José Antonio Maté, la alternativa para hacer frente a la crisis es seguir el modelo impuesto en Sevilla, donde en noviembre se alcanzó un preacuerdo para eliminar 151 permisos en un plan de 4 años. Francisco Soria, de Taxiunión, añade que este problema no sólo es consecuencia de las crisis ya que antes también había “muchísima oferta para tan poca demanda”.
La propuesta está siendo trabajada desde hace tiempo por estas dos congregaciones de taxistas, y próximamente se presentará oficialmente al Ayuntamiento. Pero medios locales informan que el equipo de gobierno del PP no está dispuesto a destinar dinero público para comprar unas licencias que se concedieron de forma gratuita y que además, creen que el número actual es adecuado. “No es que existan muchas, el problema es la sobreexplotación que lleva a que un mismo taxi esté en la calle las 24 horas del día”. Así, aboga por una reordenación de la jornada laboral estableciendo una regulación horaria de 8 horas.