Dos años después de que se cerrara el caso, la Audiencia Provincial de Las Palmas ha reabierto una de las primeras denuncias contra la gestión de licencias de taxi realizada por floteros. El taxista denunciado tendrá que responder por un fraude fiscal de 600.000 euros.
Según recoge el diario La Provincia, la Audiencia Provincial ha ordenado la reapertura del el proceso penal tras conceder la razón a la Fiscalía de Delitos Económicos de Las Palmas en el recurso de apelación presentado. Tal y como consta en los registros, el taxista denunciado gestionaba unas 40 licencias de manera irregular, por las que había dejado de declarar ganancias por más de 600.000 euros en los tres años investigados.
A mediados de 2013, la policía realizó una macro operación contra el fraude fiscal en el taxi que se saldó con la imputación de 7 personas.