Entrevista a Jesús Ramos, gerente de Creditaxi
La pignoración era un tema pendiente para el sector madrileño y de difícil respuesta sobre todo por las desfavorables condiciones económicas. Después de un largo proceso de negociaciones, por iniciativa propia y a titulo particular, la empresa.
Creditaxi, acaba de cerrar una serie de acuerdos con tres importantes entidades bancarias para que los profesionales puedan acogerse a la pignoración de las licencias. Un servicio que explican ofrecen en exclusiva a sus clientes y que les permitirá a éstos acceder a una licencia en un momento especialmente delicado para el sector. Apenas dos semanas después de la firma, ya habían realizado la pignoración de dos licencias y esperan continuar en esta línea, por entender que se trata de un servicio muy demandado por el sector desde hace tiempo.
Con la intención de prestar un servicio integral al sector, Creditaxi, que comenzó realizando gestiones de carácter únicamente financiero, en los últimos tiempos, tal y como explica Jesús Ramos, ha ido ampliando sus actividades con servicios de formación, gestión administrativa, seguros, prevención de riesgos laborales y protección de datos, entre otras. Mantenerse en esta misma línea de diversificación es la meta inmediata para 2011.
Gaceta del Taxi.- ¿Cuándo firmaron el acuerdo?
Jesús Ramos.- Empezamos la negociación hace varios años, tres por lo menos, porque desde el principio estábamos convencidos de que era opción muy interesante para el sector. Ha sido un camino largo y difícil pero por fin hace apenas un mes llegamos a un acuerdo de pignoración con tres importantes entidades bancarias.
G.T.- Para los menos entendidos puede explicar ¿En qué consiste la pignoración?
J.R.- Estamos hablando de que a partir de ahora cuando se vaya a realizar una operación financiera, la propia licencia de taxi sirve de garantía, queda en prenda, para entendernos mejor. Es decir se le concede un valor que según los acuerdos alcanzados correspondería al 60% de la inversión total por la compra de la licencia. El 40% restante o bien lo aporta el cliente con sus propios fondos o bien con parte de una garantía hipotecaria.
La operación con la pignoración de la licencia queda reflejada en la Oficina del Taxi, donde hay una reserva de dominio, que hace las veces de embargo preventivo, y cuando se termine de pagar la licencia, se le comunica al banco y se retira este embargo para disponer ya libremente de la licencia.
G.T.- ¿Cómo va a beneficiar al taxista en la financiación?
J.R.- Creemos que de una manera muy importante. Porque lo principal es que a partir de ahora con la pignoración es mucho más fácil acceder a la financiación para compra de la licencia. Sabemos que son muchos los que acuden a un banco a solicitar un crédito para adquirir una licencia y no lo obtienen. Y la razón es que los bancos desconocen por completo el sector. Nuestra labor en todo este tiempo ha sido en parte esa, que los bancos conozcan al sector y sepan cómo funciona. Antes se hipotecaba la casa, ahora se hipoteca la licencia que va a adquirirse.
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