Suspenso en accesibilidad a las ciudades españoles
La Fundación Onceha presentado un informe del observatorio de la accesibilidad universal en los municipios españoles en el que determina que las ciudades españoles no son lo suficiente accesibles para el colectivo de personas con discapacidad. Las principales quejas se centran el que muchos semáforos no disponen de avisador acústico, los coches obstaculizan su paso por aparcar mal y el pavimento en algunos casos es deficiente.
Al analizar más de 330 rutas y 250 kilómetros de calles en 70 ayuntamientos de toda España, los expertos que han elaborado el informe ha detectado que la situación no es apta para la circulación de personas con algún tipo de discapacidad. De esta manera, señalan que la primera dificultad a la que se enfrentan los ciudadanos con discapacidad visual, sería que el 67,7% de los semáforos carece de avisador acústico o que el estado del pavimento es irregular, con huecos y piezas sueltas.
Este aspecto también repercute negativamente en las personas que precisan de una silla de ruedas, que además dificultan su movilidad por obras sin señalizar, cajeros inaccesibles, basuras en las aceras. Otros de los peligros a los que se refiere el informe tienen que ver con rampas estrechas, bolardos inadecuados, bancos mal ubicados o papeleras mal diseñadas que impiden su uso a todos.
Jesús Hernández, director de Accesibilidad de la Fundación ONCE, ha destacado que el estudio ha ofrecido un dato que llama a replantearse el diseño de muchas ciudades. “Cada 130 metros hay problemas de seguridad en el pavimento” para personas discapacitadas, ha destacado Hernández, quien ha apelado a la necesidad de sensibilidad a la sociedad y de invertir a las administraciones para lograr un mundo sin barreras.