Tras la última agresión, los taxis de Gijón incrementan sus medidas de seguridad

El episodio violente acaecido a comienzos de semana, en el que un taxista fue brutalmente golpeado por una pareja, ha provocado que varios profesionales decidan endurecer la seguridad en sus vehículos incorporando cámaras de seguridad que graben todo lo que ocurre en el interior y eviten así nuevas agresiones y amenazas.

El episodio violente acaecido a comienzos de semana, en el que un taxista fue brutalmente golpeado por una pareja, ha provocado que varios profesionales decidan endurecer la seguridad en sus vehículos incorporando cámaras de seguridad que graben todo lo que ocurre en el interior y evite así nuevas agresiones y amenazas.

Esta medida es disuasoria, explican desde Radio Taxi Villa de Jovellanos, ya que los coches tendrán una pegatina exterior que avisa de la cámara y evita que ladrones y agresores se suban.

Al contrario que la mampara de seguridad, que no puede ser utilizada por todos los vehículos (entre ellos los eléctricos), la cámara de seguridad es compatible con todos los vehículos y, apuntan desde la organización, es también un método muy seguro y fiable.

Se busca al agresor

Aún continúa la búsqueda del hombre, de unos 30 años y de etnia gitana, que agredió al taxista. Las razones de tal agresión tuvo como inicio la discusión entre el cliente y su acompañante, en las que en un momento determinado el taxista se vio involucrado, recibiendo numerosos golpes en la cara y en la cabeza y una hemorragia en el oído. Al solicitar éste ayuda a varios compañeros, las dos personas huyeron.