“Una vez que pruebas el taxi es muy complicado dejarlo”
Con más de 275.000 seguidores en TikTok -la red social por excelencia hoy en día y que la mayor parte de los jóvenes (y no tan jóvenes) tienen instalada en sus teléfonos móviles-, Raúl García, alias Saixe, taxista de Madrid, traslada cada día desde su taxi mensajes donde desvela los entresijos de su profesión y defiende las bondades del sector.
“Soy taxista desde el primer momento en el que pude serlo”, explica este joven madrileño de 21 años de edad en esta entrevista concedida a La Gaceta del Taxi. Con solo dos años de experiencia ya es uno de los profesionales con más repercusión en nuestro país. Hijo de taxista, y enamorado de su profesión, Saixe deja claro que el taxi “tiene mucho futuro” y que “una vez que lo pruebas, es muy complicado dejarlo”.
Gaceta del Taxi.- ¿Cuándo empezó su aventura dentro del sector del taxi?
Raúl García.- Estaba estudiando y me desanimé mucho con mis estudios. Quería trabajar y quería tener dinero porque siempre me ha dado mucha vergüenza pedir dinero a mis padres. Llega una edad en la que uno quiere tener su propio coche, irse de vacaciones con los amigos, etc. Estalló la pandemia y encontrar trabajo se volvió más difícil. Entonces mi padre me dijo que si quería trabajar que me sacase la cartilla del taxi. Mi padre me fue claro, me dijo que estaba la situación mal pero me advirtió que desde ese momento en adelante solo iba a notar mejoría. Me animé y se puede decir que soy taxista desde que pude. Estuve algo más de un año trabajando para otra persona y de nuevo mi padre me dijo que le echase valor y tuviera mi propia licencia y me lancé a la aventura
G.T.- ¿Le gustó el trabajo de taxista?
R.G.- Me gustó desde un primer momento. Incluso estando en una situación mala como en la que empecé, me apetecía este trabajo. Una vez que pruebas el taxi es muy complicado dejarlo.
G.T.- ¿Qué es lo que más valora de la profesión de taxista?
R.G.- La libertad que tienes a la hora de trabajar. Es una ventaja que en muy pocos trabajos tienes. Si eres titular de licencia te puedes organizar como quieras en términos de horario, o si un día no puedes trabajar no pasa nada ni tienes que dar explicaciones a nadie y puedes recuperar cualquier otro día. Esa flexibilidad hay que valorarla, cada día es una aventura, no estás en una oficina donde siempre es lo mismo. Hay días que son mejores y peores, pero uno se lo marca como quiere y esa libertad me gusta bastante.
“En Madrid hay muchos taxistas jóvenes”
G.T.- Es un taxista muy joven y no es habitual que haya profesionales de su edad. ¿Qué tal esas charlas con los compañeros que, la mayoría, tienen más edad?
R.G.- Esa es la sensación que hay, pero gracias a las redes sociales me han contactado muchos taxistas de mi edad. Poco a poco en este tiempo hemos contactado y hemos quedado para conocernos. Hemos hecho un grupo donde estamos en torno a 20 taxistas jóvenes y estamos durante el día comunicándonos, llamándonos y haciendo las jornadas más amenas. Nos ayuda para desahogarnos.
G.T.- Ese grupo sirve para romper con el falso mito de que el taxi a lo mejor, hoy en día, es para gente de mayor edad.
R.G.- Sirve para romper con esa imagen que hay hoy en el taxi, sí. Porque hay muchos taxistas jóvenes y en el grupo que tenemos nosotros lo pasamos súper bien. El taxi tiene mucho futuro, estoy convencido.
G.T.- Ya sabemos lo que más le gusta del taxi. Ahora, ¿cuáles son las cosas que le desagradan o que piensa que deberían cambiar?
R.G.- Quizás la mentalidad de algunos compañeros. Un ejemplo se vive ahora en la estación de Chamartín. La estación está en obras y la gente sale por donde habitualmente estaban antes los taxis y ahora no están situándose allí, porque están en la planta de abajo en la bolsa. Pues hay compañeros que, sabiendo que no se puede, deciden cargar pasajeros arriba cuando hay compañeros esperando su turno en la bolsa. En mi caso, porque hay veces que tienes que pasar por ahí para ir a la bolsa y voy en libre, alguna vez me ha llamado algún cliente y lo que le he dicho es que debe seguir las indicaciones de los carteles y abajo coger el taxi. Eso no cuesta nada y hay muchos compañeros que se dedican a cargar arriba.
G.T.- Otro ejemplo es el video que se hizo viral con uno de los streamers más famosos incluso del mundo, The Grefg, que tuvo una mala experiencia con un taxista que se quejaba de lo corta que era una carrera.
R.G.- Exacto. Al final hay carreas buenas o carreras malas que tampoco te llegan a interesar del todo porque te dejan mal situado, o hay mucho tráfico y no compensa. Pero un día te pasa a ti y otro día me pasa a mí. Lo importante es que el cliente coja y se mueva en un taxi. Todo suma.
G.T.- Trabaja el taxi sobre todo durante la noche. Durante esas horas también es cuando se ven más VTC. ¿Cómo es la convivencia en las calles de Madrid con los conductores de estos vehículos?
R.G.- Si es verdad que son gente que no está formada, que no ha tenido que aprobar ningún tipo de examen para trabajar en esto. Son conductores que trabajan para multinacionales y que utilizan este tipo de trabajo de paso, con poca permanencia, como mucho tres meses. Hay muchos seguros que dejan de asegurar este tipo de vehículos por el elevado nivel de siniestralidad en comparación con el taxi. En el taxi somos más que ellos y tienen un porcentaje mucho mayor que nosotros de siniestros.
G.T.- La Comunidad de Madrid ha abierto el debate en los últimos meses sobre la necesidad de liberalizar los horarios del taxi o sobre el hecho de que el taxímetro deje de tener tanta importancia. ¿Qué piensa al respecto?
R.G.-Pienso que, si un día se regularizó, se pusieron días de libranza o se establecieron 16 horas máximas de trabajo diario, sería por algo. Si el taxi se liberaliza va a ser la selva. Hay días que hay poco trabajo y si ahora hubiera 24 horas trabajando taxis, habría aún menos. La regulación se hizo para repartir más el trabajo con los taxistas y si encima ahora que tenemos más competencia en la movilidad, con muchos más servicios, pienso que nos va a costar mucho más hacernos con la hoja diaria y vamos a tener que trabajar muchas más horas. A mí me gusta trabajar mis horas y poder irme tranquilo a mi casa. No quiero estar esclavizado ni tener que trabajar muchas más horas para poder hacer mi hoja diaria y pienso que si en su día se hizo es por algo.
El boom de TikTok
G.T.- Analizado el taxi. Cuéntanos, ¿cómo empezó con TikTok y en qué momento se empezó a ir de las manos?
R.G.- Antes de ser taxista, durante la cuarentena, hacía videos con mi abuela en TikTok. Me empezó a ir bien y me gustaba mucho el mundo de las redes sociales. Empecé en el taxi, a subir videos en el coche y ya no podía ver tanto a mi abuela porque estaba en su casa y estaba todo el día trabajando. Aun así, seguí haciendo videos dentro del taxi, pensé que era curioso y ya cuando me compré mi licencia empecé a tener más repercusión y ya el boom llegó cuando compré el coche nuevo y empecé a tunearle. La gente veía un taxi tuneado y le empezó a gustar. A partir de ahí empecé a hacer videos que tenían buena acogida y hasta hoy.
G.T.- ¿Esperaba tanta viralización?
R.G.- Tampoco me considero que sea nada del otro mundo, aunque las cifras están. Me gusta usar las redes para llegar a gente, comunicar lo que pienso, lo que opino y para expresarme. Me ayuda mucho y hay gente que está de acuerdo conmigo y hay gente que no. Pero como medio de expresión y para ayudarme a quedarme cómodo con algo es muy útil. También sirve mucho para que la gente opine y lo comentamos, es una herramienta muy buena y estoy muy contento la verdad. A través de mi perfil puedo llegar a bastante gente, aportar un granito de arena que se pueda llegar a ver nuestro trabajo.
G.T.- Cuando habla de llegar a la gente. Una de los debates que ha destapado más interés es el de los taxistas contra algunas plataformas. ¿Se está enfrentando el sector contra un muro imposible de derribar?
R.G.-Pienso que sí que se puede derribar. Este tipo de empresas van en perdidas porque su estrategia de marketing es hacer ver lo baratos que son, o transmitir que son un servicio premium. Pero el precio lo tienen por debajo del mercado, están en pérdidas. Un lunes a las 11.00 de la mañana están en pérdidas, pero los fines de semana multiplican el valor. Su estrategia es bajar los precios todo lo que puedan. Si los taxistas somos capaces de aguantar cinco años más, estas aplicaciones se van a ir. Tienen un rango de pérdidas determinado y el taxista tiene que aguantar.
G.T.- Recientemente ha lanzado una aplicación en Madrid. ¿De qué se trata?
R.G.- Hemos lanzado TaxiCoin. La hemos sacado con el objetivo de que los taxistas disfruten de muchas ventajas y queremos diferenciarnos de otras aplicaciones. Queremos ofrecer ese cara a cara y que si un taxista pide algo se le pueda dar, que tengan un feedback. Por ejemplo, queremos tener convenios con talleres, concesionarios, ese tipo de cosas para que el taxista pueda tener esa ayuda para disfrutar de ventajas.
Javier Izquierdo