En la próxima ordenanza municipal del taxi que pretende aprobar el Ayuntamiento de Cadiz está incluida la obligatoriedad para los taxistas de adoptar una determinada vestimenta a la hora de prestar servicio. Esta novedad ha sido criticada por una buena parte del sector que recalca la buena presencia de los profesionales que prestan servicio en la ciudad gaditana.
El texto aún se encuentra en fase de exposición pública para la recogida de alegaciones antes de presentarse al Pleno. Los taxistas, entre sus alegaciones a las que ha tenido acceso el Diario de Cádiz, se niegan a la obligatoriedad de llevar un uniforme impuesta por el Consistorio.
Según el proyecto de ordenanza, el artículo 65 refleja que los taxistas “deberán prestar el servicio debidamente aseados y con corrección en vestimenta y calzado…”. Además, continúa el precepto, “en ningún caso se permitirá el uso de chanclas, sandalias sin sujeción posterior o cualquier calzado que pueda comprometer la seguridad vial durante la conducción”.
“Deberán vestir con pantalón largo color oscuro (preferentemente azul), camisa clara (preferentemente blanca) y jersey de tonos oscuros”, estipula el artículo, que sí que da la posibilidad de que se pueda sustituir, si la climatología así lo aconseja, el jersey o la camisa por un polo de manga corta de tono claro, preferentemente blanco.
Los taxistas rechazan la obligatoriedad del uniforme, afirmando que el Ayuntamiento quiere tener pleno control sobre el sector y recordando que la mayoría de los profesioanles viste mejor que el propio equipo de gobierno.
Desde una parte del colectivo también están en contra del “desproporcionado control” que quieren hacer de los servicios al querer geolocalizar vía GPS los vehículos, ya que consideran que supone un ataque al derecho a la intimidad. Tampoco están de acuerdo en la obligación de que los taxis adaptados están disponibles las 24 horas del día. /TAMBIÉN ES NOTICIA