Condenado un concesionario a pagar 735 euros a un taxista

El Juzgado de Primera Instancia número 2 de Fuenlabrada ha condenado a un concesionario de la ciudad, Gamboa Ecoauto, a pagar 735,30 euros más intereses al propietario de un taxi que fue comprado en sus instalaciones. La razón de la condena es que se retrasó un día en la fecha de entrega prevista.

 

Con el retraso de ese día, y dado que coincidía con fin de semana, el taxista denunció un perjuicio económico, pues tuvo que esperar dos jornadas más para pasar los controles municipales y obtener así su licencia.  Los dos conductores asalariados del propietario no pudieron, por lo tanto, conducir el vehículo hasta tres días después.

 

El taxista acudió a los tribunales y ahora ha de ser indemnizado por más de 700 euros. Automovilistas Europeos Asociados  (AEA) ha sido la entidad encargada de la defensa del denunciante. Su presidente, Mario Arnaldo, ha recordado a la Cadena Ser que los vendedores de los concesionarios adquieren una obligación contractual y no la pueden incumplir a la ligera.

 

Los servicios jurídicos de AEA, en defensa de los intereses del taxista, enviaron previamente una serie de reclamaciones amistosas al concesionario. Desde la empresa vendedora se alegó que “el retraso había sido solo de unas horas por lo que no se había causado ningún perjuicio al taxista”.

 

Sin embargo, una vez que la vendedora reconoció el retraso, la sentencia considera que éste sí que comportó un perjuicio para el titular y por tanto debe ser indemnizando en virtud de la figura jurídica del lucro cesante.

 

“Los vendedores tienen responsabilidad en el retraso en la entrega porque eso es un incumplimiento de contrato y en casos como este tienen que indemnizarse aquellos daños y perjuicios que se hayan acreditado”, explica Arnaldo.