Action for Cabbies, un nuevo grupo de apoyo a los taxis de Londres, ha recurrido al crowdfunding para iniciar una revisión judicial sobre la decisión de permitir a Uber operar en la capital británica. Piden salvar al icónico taxi negro londinense, a sus familias y a las industrias asociadas.
A través de esta iniciativa de crowdfunding, una fórmula de cooperación colectiva popular para recaudar dinero, aspiran a conseguir 600.000 libras. Una cantidad con la que quieren financiar un recurso de casación contra la empresa de transporte londinense, TfL, a la que califican de “inepta” tras haberle concedido a Uber licencia para operar en la ciudad. Sus abogados creen que sí existe base legal para lo que consideran un primer paso de lo que esperan que sea un “desafío legal” para la empresa americana.
Desde este grupo, liderado por la mujer de un taxista londinense, consideran que TfL no han sido capaces de hacer cumplir la ley. “Es de suma importancia para la seguridad pública que la TfL regule no lo están haciendo y están operando fuera de su competencia, dando licencias a Uber que operan fuera del marco legal”.