De las 60 licencias que el Cabildo y el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ofrecían rescatar, con una ayuda prevista de 40.000 a cada vehículo por el cese de la actividad, únicamente se han aceptado 23 solicitudes.
El rescate de licencias de taxi en Santa Cruz no está dando los resultados que el sector esperaba. Aunque las administraciones han ofrecido la posibilidad de retirar de la circulación a 60 licencias, sólo se han acogido al rescate 23. A pesar de esta cifra tan baja hay que aclarar que en su día se presentaron 52 solicitudes pero sólo fueron admitidas 23 por entender que eran las que cumplían los requisitos mínimos.
Según los taxista, la solución para conseguir una mayor acogida sería ampliar el plazo para subsanar errores de las otras 29 licencias. El problema también ha radicado, cuenta a medios locales Domingo Lara, de la Unión de Trabajadores Autónomos del Taxi (UTAT), en la desconfianza de muchos taxistas hacia la Administración y las duras condiciones para poder acogerse al plan. El responsable de UTAT cuenta el caso concreto de un taxista que debía un recibo de la basura del año 99, y aunque lo pagó incluso habiendo prescrito, su petición fue rechazada.
Precisamente la condición exigida por el Ayuntamiento y el Consistorio de tener que estar al día de todos los pagos administrativos es una de las más criticadas por el resto de asociaciones de taxistas. Miguel Ángel González, secretario de la cooperativa San Marcos, explicó que algunos dueños de licencias de taxis no estaban al corriente de sus pagos a la Seguridad Social precisamente a consecuencia del mal estado del sector y del exceso de licencias.