Destrozan el coche a un taxista de Sevilla que había sido amenazado

Un taxista de Sevilla, que días antes había denunciado amenazas en el aeropuerto de la capital andaluza por parte de otros compañeros, se encontró durante la madrugada del sábado al domingo 24 de noviembre con su vehículo destrozado cerca de su domicilio. El taxi presentaba las lunas, los espejos y los retrovisores rotos, daños en los faros, las ruedas pinchadas y varios golpes en la carrocería.

 

Según ha confirmado el afectado a este medio, la Guardia Civil está investigando los hechos y los primeros indicios apuntan a un acto de represalia en respuesta a una denuncia que este taxista y otros compañeros interpusieron contra un grupo de compañeros que, supuestamente, ejercen un “monopolio” sobre los servicios en el Aeropuerto de San Pablo en Sevilla.

 

Las denuncias presentadas por varios profesionales del sector contra el grupo del aeropuerto, integrantes de la Asociación Hispalense Solidaridad del Taxi, han desencadenado unos momentos de tensión que, tal  y como relata el afectado, “pueden acabar muy mal”.

 

El taxista ha reconocido que días antes de sufrir el sabotaje sobre su vehículo, era consciente de que un grupo de taxistas del aeropuerto le estaba siguiendo, algo propio de “las prácticas mafiosas”, asegura. El seguimiento se había iniciado tras la denuncia que había presentado ante la Policía por las amenazas sufridas.

 

Durante la noche del sábado, en un corto espacio de tiempo en el que descansaba, se produjo el ataque que, entre otras cosas, le va a impedir trabajar durante toda esta semana. Pese a este hecho, la víctima asegura que va a seguir trabajando “sin miedo” aunque asegura que la situación que se vive en el sector en el aeropuerto es “la peor que me he encontrado nunca”.

La víctima entre otras cosas lleva a cabo servicios de “transfer”  y cubre trayectos precontratados para trasladar a los clientes del hotel al aeropuerto e viceversa. Los conductores  del aeropuerto, sin embargo, recriminan a estos taxistas que recojan a los clientes y han aparecido videos donde realizan “escraches” a aquellos profesionales que no son de su asociación con los usuarios montados en el vehículo.

 

Hay que recordar que una treintena de taxistas del aeropuerto de Sevilla están siendo investigados en una macro causa que continúa abierta en el juzgado de Instrucción número 8 de la capital andaluza por la presunta existencia de una organización criminal y la comisión de delitos de diferente consideración.