Durante la noche del jueves 6 al viernes 7 de diciembre, dos taxistas lograron disuadir a tres ladrones que se disponían a robar en una tienda de telefonía en la asturiana localidad de Llanes.
El ruido que provocaron los ladrones al utilizar el método del alunizaje para entrar en el establecimiento alertó a dos taxistas que estaban en una parada cercana. Los profesionales del taxi se dirigieron a la tienda para evitar el robo mientras que los ladrones vaciaron un extintor para evitar que frenaran su intención de robar.
En ese momento, según informa El Comercio, uno de los dos taxistas cogió una banqueta de un bar cercano para hacerles frente, al tiempo que uno de los ladrones intentaba atropellarle con el coche con el que pensaban huir.
Finalmente los ladrones salieron huyendo en dirección contraria y dejaron los teléfonos que habían sustraído sobre la carretera. La Guardia Civil se personó a los pocos minutos de comenzar el escándalo.