El Consejo Constitucional Francés acaba de decretar que los conductores adscristos a la plataforma Uber podrán calcular sus tarifas con el mismo criterio que los taxistas, pero no podrán captar a sus clientes por geolocalización, infoma EFE
Con este dictamen, el máximo órgano jurídico galo invalida el artículo del código francés de Transporte, que limitaba a los taxis la imposición de tarifas en función de la duración y la distancia de cada carrera, lo que en principio supone una victoria parcial para la compañía norteamericana.
El Consejo Constitucional señaló en un comunicado que tal prohibición carece de fundamento al no estar justificada por "un motivo de interés general". El decreto del tribunal, sin embargo, sí impedirá a Uber servirse de la geolocalización para facilitar las reservas entre clientes y conductores. Estos últimos tampoco tendrán derecho a estacionar sus vehículos a la espera de nuevas carreras, al carecer de zonas habilitadas para ello, como sí sucede con los taxis.
La firma estadounidense espera que el Consejo Constitucional examine en los próximos semanas el encaje legal de su filial de bajo coste UberPOP, que permite a los particulares emplear sus vehículos.
En Francia, Uber opera amparada en un vacío legal desde que en febrero de 2014 lanzara su negocio en seis ciudades del país, un servicio que utilizan diariamente un millón de franceses, según datos de la compañía.
Uber, presente ya en 19 paises de la UE mantiene también litigios en España, Alemania, Bélgica y Holanda tras protestas del sector del taxi, que denuncia que la empresa ejerce una competencia desleal al ofrecer un servicio remunerado de transporte con conductor privado sin tener licencia.