A pesar de que la Justicia de Buenos Aires ordenó la suspensión de cualquier actividad que pudiera desarrollar Uber en la capital argentina, la compañía norteamericana sigue operando ante la incredulidad de los profesionales del taxi, que han decidido denunciar a sus responsables.
La suspensión a la actividad de transporte que lleva a cabo Uber se trata de una medida cautelar solicitada por los taxistas y que se mantendrá vigente hasta que se conozca la sentencia definitiva del Juzgado Número 15 de Buenos Aires. Sin embargo, la empresa californiana ha decidido no respetar la decisión judicial y seguir operando.
Aunque es cierto que Uber continúa con su actividad de transporte, ésta es limitada puesto que la Justicia, en aras de asegurar que se ejecutaba la suspensión cautelar, ha conseguido que la mayoría de las tarjetas de crédito no puedan cobrar los viajes.
Horacio Pérez, presidente de la Cámara Empresarial del Auto-taxi (Cametax), confirmó a La Gaceta del Taxi que las asociaciones del sector han presentado el pasado lunes una denuncia penal contras los directivos de Uber y también contra los conductores que han sido sancionados, éstos últimos acusados de ser “partícipes necesarios”.
Por otro lado, las entidades representativas del taxi en Buenos Aires han solicitado una reunión con el Jefe de Gobierno de la Ciudad, para conocer los avances en los operativos contra la aplicación. No está descartada, una vez finalizadas las reuniones, llevar a cabo una gran movilización por las calles de la capital de Argentina.