Para superar la profunda crisis en la que está inmerso el sector, que llegó a parar durante tres meses, dejando a unos 18.000 profesionales sin ingresos, la Federação Portuguesa do Táxi y la Associação Nacional de Transportes públicos Rodoviários de Mercadorias, han solicitado 5.000 euros de ayuda por licencia así como una línea de crédito.
“Solicitamos 5.000 euros por licencia, con un 80% no reembolsable y un 20% con intereses bonificados, y también una línea de crédito para tesorería a cinco años con intereses también bonificados", ha explicado Carlos Ramos, presidente de la Federação.
Según las dos organizaciones, la caída del turismo está afectando negativamente al sector y consideran complicado prever un regreso a la normalidad en el taxi. “La situación es grave”, insisten desde el taxi, y por eso han solicitado ayuda a los partidos, que sí parecen haber comprendido que el sector necesita ser apoyado.
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