Las medidas propuestas por el Ayuntamiento de Madrid al Ministerio de Fomento para regular el sector de las VTC y mejorar la convivencia con el taxi, han sido vistas con buenos ojos por parte de la Federación Profesional del Taxi de Madrid (FPTM).
En el día de ayer, la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena; la delegada de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés; el director de movilidad, Francisco López; y el delegado de seguridad, Javier Barbero, explicaron a los representantes de FPTM las conclusiones de la reunión que mantuvieron con el Ministerio de Fomento el pasado 6 de junio. Este encuentro ante la administración dirigida por Iñigo de la Serna se produjo tan solo una semana después de que el sector del taxi de toda España saliera a las calles de Madrid para protestar por la concesión de VTCs y su actividad.
En la citada reunión, los consistorios de Madrid, Barcelona y Zaragoza solicitaron a Fomento la creación de una normativa específica para regular el sector de las VTC y frenar la especulación con las autorizaciones.
Julio Sanz, presidente de FPTM, ha asegurado en nota de prensa estar “muy satisfecho” por las medidas planteadas por el gobierno madrileño a la administración central. Además, ha recordado el compromiso del taxi con los usuarios al afirmar que es un sector que constantemente “se está adaptando a las nuevas necesidades de la población”.
La FPTM también ha presentado en el encuentro mantenido con los representantes del Ayuntamiento de Madrid, una serie de propuestas para impulsar aún más el servicio que el taxi ofrece a los ciudadanos. Entre esas propuestas destaca la puesta en marcha de una tarifa social, con descuentos para colectivos en riesgo de exclusión, así como una tarifa ecológica, aplicable a los ciudadanos que decidieran trasladarse en taxi durante episodios de Alta Contaminación.
FPTM también ha planteado, entre otras medidas, que el Ayuntamiento estudie la posibilidad de implantar tarifas fijas para determinadas rutas específicas que conecten intercambiadores con algunas ciudades dormitorio, y que se establezca un uniforme obligatorio para los conductores de taxi, como ya lucen otros colectivos.