INFORME: Un lustro de crecimiento máximo de VTC y un año 2022 decisivo

Desde hace meses son muchas las voces que vienen avisando que 2022 es un año transcendental para conocer, quizás de forma definitiva, qué papel jugarán los vehículos de alquiler con conductor (VTCs) en el sector del transporte de viajeros en nuestro país. A lo largo de este año, decisiones judiciales y legislativas determinarán qué servicios podrán realizar estos vehículos y cómo afectará al colectivo del taxi.

 

Una de las razones claves para entender cómo se ha llegado a este punto y porqué será tan importante lo que ocurra en los próximos meses, es el importante crecimiento de este tipo de vehículos en los últimos años. La autorización VTC lleva existiendo en nuestro país durante décadas, pero ha sido en los últimos cinco años cuando el volumen de estos coches se ha multiplicado de forma radical.

 

Para ser más exactos, España cuenta actualmente y según datos ofrecidos por el propio Ministerio de Transportes con 17.932 autorizaciones VTCs. Pero si nos remontamos a marzo de 2017, hace ahora menos de cinco años, el número de este tipo de vehículos era de apenas 5.735. Esto significa que, en el último lustro, nuestro país ha visto como el número de VTCs se incrementaba en más de 12.000 autorizaciones.

En enero de 2018, hace ahora cuatro años, el número de vehículos de alquiler con conductor era de 6.711. Es decir, a lo largo de 2017, el incremento de este tipo de autorizaciones estuvo cercano al millar. Algo que en ese momento llamaba la atención, pero que quedó en nada comparado con lo que sucedió a lo largo de ese mismo año, ya que fue durante esos meses de 2018 cuando el aumento de las VTCs se vio completamente desbocado.

 

Subida extrema en 2018

 

En un año muy importante para la regulación de las VTCs como también fue 2018, el número de estas autorizaciones se vio multiplicado por dos. Es decir, solo en 12 meses se incrementó en un 100% el volumen de este tipo de coches de alquiler. Con fecha de enero de 2019, el número de VTCs era ya de 13.125, frente a las 6.711 que aparecían registradas doce meses antes.

 

Este espeluznante aumento coincidió en el tiempo con la vista judicial y la resolución del Tribunal Supremo que vino a refrendar el 1/30 y que, paradójicamente, consiguió evitar que el número de VTCs sea hoy aún mayor del que es. En junio de 2018, el Alto Tribunal dictó sentencia a favor del taxi y daba por bueno el Reglamento de Ordenación de Transportes Terrestres (ROTT) que aprobó el Gobierno de España en diciembre de 2015 y por el que todas las autorizaciones que fueron solicitadas posterior a la aprobación de dicho Reglamento, no deberían ser concedidas dado que ya se superaba la ratio de una VTC por cada 30 taxis establecido en la norma.

 

Antes de esta transcendental decisión del Supremo, quedaban en el aire cientos de miles de VTCs. Se calcula que había solicitadas más de 120.000 autorizaciones que, gracias a esa decisión judicial, no saldrían a las calles. Sin embargo, será en los próximos meses cuando el Tribunal vuelva a estudiar la proporcionalidad 1/30 que debe haber entre taxis y VTCs.

 

El pasado mes de junio de 2021, el Supremo admitió a trámite un recurso de casación presentado por Cabify contra una sentencia previa del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad de Madrid que rechazaba conceder mil VTCs a la compañía. La Sala de lo Contencioso Administrativo del Alto Tribunal decidió admitir la cuestión planteada por Cabify y ahora este año decidirá sobre si “reforzar, completar, matizar o, en su caso, corregir la jurisprudencia” sobre la ratio 1 VTC/30 taxi.  

 

En concreto, Maxi Mobility Spain S.L (Cabify) planteó en su recurso que la limitación 1/30 no iba acorde con ciertos artículos del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea relativos a la libertad de establecimiento en el mercado y a las ayudas de carácter estatal. El Supremo entendió que en su sentencia de hace tres años no fijó posición sobre las implicaciones o consecuencias jurídicas que tendría la implantación del 1/30 con respecto a la normativa europea. No se plantearon los magistrados de la Sala si establecer esa limitación suponía un perjuicio para las VTCs contrario al derecho comunitario e, indirectamente, una ayuda al sector del taxi.

 

Pero este no será el único procedimiento, dado que se calcula que hay abiertos al menos otros 14 procesos similares donde determinadas empresas habían solicitado un buen número de VTCs, estas fueron rechazadas y ahora el Supremo deberá determinar qué sucede con ellas. En estos procedimientos, y en defensa del sector del taxi estarán presentes la Asociación Nacional del Taxi (Antaxi) y la organización Taxi Project.

 

Más allá del proceso judicial llevado a cabo en el Supremo y que todavía no se ha cerrado, durante 2018 se vivieron meses muy convulsos con manifestaciones importantes del sector del taxi en Madrid y Barcelona que culminaron con una huelga general a comienzos de 2019 y que, en el caso de la capital, se prolongó durante 16 días. Durante ese periodo de tiempo el número de VTCs continúo creciendo, pero ya en menor medida. En enero de 2020 el volumen de VTCs era de 16.550. De hecho, en los tres últimos años se ha incrementado el número de VTCs en casi 5.000, pasando de 13.125 en 2019 a las 17.932 de la actualidad. Esto significa que, de media, a lo largo del último trienio se ha incrementado la flota de estos vehículos en nuestro país en torno a 1.600 por año; muy lejos del extremo crecimiento de 2018, aunque se mantiene constante ese “goteo” que cada vez pone en más estado de alerta a los taxistas.

 

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