Dos profesionales del sector del taxi de Sevilla tomaron declaración en el día de ayer en calidad de detenidos ante la Brigada Provincial de Información de la Policía Nacional. A ambos taxistas se les imputan delitos contra la seguridad vial, amenazas, coacciones y pertenencia a organización criminal.
Los taxistas, uno de 22 y otro de 25 años de edad, permanecieron arrestados mientras estaban declarando y posteriormente fueron puestos en libertad con cargos. Ninguno de los dos profesionales del taxi contaba con antecedentes.
Las detenciones se producen en el marco de una investigación iniciada hace meses por la Policía Nacional tras presentarse varias denuncias por parte de otros taxistas y conductores de vehículos de alquiler con conductor, donde se señalaban coacciones y amenazas sufridas en el aeropuerto de San Pablo en Sevilla.
Buena parte del sector del taxi apunta que desde hace más de quince años un grupo de taxistas ha asumido un monopolio en los servicios aeroportuarios. Los hay que señalan a la asociación Solidaridad Hispalense del Taxi, que tienen la sede en el aeropuerto, la cual fue registrada el pasado domingo por los agentes. En el registro se llevaron ordenadores y material informático para un posterior análisis y, tras el mismo, fue detenido un taxista de 59 años por tener en su vehículo un punzón, huevos, jeringuillas y una capucha. El taxista fue ayer imputado por la Policía Nacional por una presunta pertenencia a organización criminal.
Con las dos detenciones de ayer son ya 30 los taxistas investigados por supuestas coacciones, amenazas y pertenencia a banda criminal por parte de la Policía, que considera que existe una banda de delincuentes dentro del sector del taxi en Sevilla.