La Policía Nacional ha retirado ayer una cámara y varios monitores de la sede de la asociación de taxistas Solidaridad Hispalense, que ejerce el control de la parada del aeropuerto de San Pablo de Sevilla.
La intervención policial informa diariodesevilla.es se ha realizado por orden de la juez de Instrucción número 8 de Sevilla que dirige la investigación contra la mafia del taxi que opera en la capital hispalense, en la que están imputados decenas de taxistas del aeropuerto por distintos delitos.
Para garantizar que no se produjera ningún incidente, en la operación se han desplegado varios furgones de la Unidad de Intervención Policial (UIP), los antidisturbios.
El auto de la juez ordenaba la retirada de la cámara que da visión al túnel de llegadas, y que los taxistas pueden ver desde su sede. La magistrada considera que esta filmación vulnera la Ley Orgánica de Protección de Datos. También se han retirado unos monitores donde los taxistas consultaban información sobre la hora aproximada de llegada de los vuelos.
En las últimas semanas se han registrado varios incidentes en el túnel de llegada. Algunos taxistas que no pertenecen a esta asociación han denunciado de forma reiterada el acoso que soportan por parte de otros profesionales. En más de una ocasión para impedirles hacer su trabajo los profesionales han sido insultados y sus coches rodeados a llegar a esta parada de taxis del aeropuerto.
Históricamente esta zona, recuerda el diario, ha sido el punto más caliente del conflicto del taxi sevillano, con pinchazos de neumáticos, lanzamientos de huevos, piedras y otros objetos y sabotajes varios a taxistas que no pertenecían a esta asociación y querían trabajar en el aeródromo.
La macro causa de la mafia del taxi sigue abierta con decenas de taxistas del aeropuerto imputados por varios delitos, entre ellos el de pertenencia a organización criminal. La sede de Solidaridad Hispalense ya fue registrada al inicio de esta investigación por los agentes de la Brigada de Información de la Policía Nacional.