La CNMC ha sancionado dos cárteles formados por empresas de transporte de viajeros en la comunidad autónoma de Cantabria tras la denuncia de la Federación Cántabra del Taxi. Según Competencia, las empresas adoptaban acuerdos de reparto de mercado y de no competencia. En la misma resolución también se sanciona a una asociación por haber realizado una recomendación colectiva de precios prohibida por las normas de defensa de la competencia.
En octubre de 2019, la Federación Cántabra del Taxi denunció a 25 empresas y a dos asociaciones por posibles prácticas restrictivas de la competencia en la prestación de servicios de transporte público de viajeros por carretera en Cantabria. Ahora, casi dos años después, la CNMC ha constatado que cinco de esas empresas adoptaron acuerdos para repartirse una gran cantidad de rutas de transporte escolar entre los cursos 2011/2012 y 2018/2019 “con el único objeto de eliminar la competencia en las licitaciones de muchas rutas de transporte escolar”.
Por otro lado, en el transporte discrecional de viajeros, ha quedado probado que, en este mercado, las empresas Benito y Turytrans establecieron acuerdos anticompetitivos a fin de repartirse servicios de transporte discrecional de viajeros con origen en Cantabria. Además, en el año 2018, la Unión Patronal de Autotransporte de Viajeros de la Provincia de Cantabria (UPAVISAN) realizó una recomendación colectiva de precios, conducta contraria al artículo 1 de la LDC y la CNMC le impone una multa por importe de 5.000 euros. /TAMBIÉN ES NOTICIA