“En Barcelona, los asalariados quieren luchar por el taxi”

Alberto Álvarez, uno de los nuevos representante de los asalariados de Barcelona en la Taula Técnica del Taxi tras la consulta del pasado 5 de mayo, habló con La Gaceta del Taxi días antes de las elecciones, Miembro también de la Asociación Élite Barcelona, Álvarez no cesa en su deseo de unir a los autónomos y asalariados en contra de los, en su opinión, que quieren acabar con el sector del taxi.

La Gaceta del Taxi.- Es la primera vez que el IMET decide incluir a los asalariados en la Taula Técnica del Taxi de Barcelona, ¿qué piensa que pueden aportar los no titulares en esta mesa?

Alberto Álvarez.- Desde la asociación Élite Taxi se hizo esta propuesta porque muchos de los que forman parte de la misma somos asalariados. Pensamos que hoy en día, todos debemos ser considerados como taxistas, ya que todos defendemos nuestra profesión. Esta propuesta fue aceptara por el IMET y este año habrá una papeleta más. Pero aprovecho para informar que nuestra posición en la mesa no será tan vinculante como la de los autónomos.

Hay que tener en cuenta que los asalariados no nos estamos jugando nuestro patrimonio y por eso, hay que entender que en ciertas futuras decisiones, no entraremos. Pero queríamos que el asalariado tuviera voz y voto y, es cierto que en Barcelona se está empezando a conseguir una importante unión entre asalariados y autónomos.

G.T.- Precisamente eso que comenta rompería con la sensación de que existen como dos bandos dentro del mismo sector…

A.A.- Sí, porque hay muchos autónomos que nos culpan de que les quitamos horas, cuando somos nosotros víctimas del sistema también, sobre todo somos víctimas de las personas que especulan con las licencias. Nos gustaría cumplir con un convenio y trabajar ocho horas y el que diga lo contrario está mintiendo. Sabemos quiénes son los culpables de esta situación. Es que, además, en el último convenio que se firmó, la patronal negoció con CCOO y UGT, sindicatos ambos que no están en el taxi. Esto lo vemos muy injusto y es algo que no tiene mucho sentido, porque si de verdad defendieran al sector, no permitirían las situaciones que se están viviendo actualmente dentro del taxi.

Apuesta por el diálogo

G.T.- ¿Cuál es el principal objetivo que se han propuesto para la defensa de los asalariados durante los próximos cuatro años?

A.A.- El primer objetivo, como digo yo, es “abrir el melón”. Es decir, queremos que no se renueve el convenio que hay actualmente –la próxima revisión está prevista para 2017- y lo vamos a evitar por todos los medios. Pero, para ello, debemos contar con la unión de los autónomos como parte afectada por la explotación que sufren ciertos asalariados, pues al fin y al cabo les quitan trabajo. Esta unión puede sonar a “chino” para muchos, pero es otra manera de entender cómo funcionan las cosas y hoy en día estamos en conversaciones y creemos que lo podemos conseguir. Tenemos que presionar a los sindicatos para que podamos formar parte de ese convenio.

G.T.- La mejora de ese convenio, ¿podría traducirse en una mejor regulación del sector del taxi en Barcelona?

A.A.- Efectivamente. Se trata simplemente de llegar a acuerdos. Aún es cierto que no hay nada claro y tenemos un cúmulo de ideas en el aire, pero entendemos que debe haber voluntad por todas las partes. Debemos implicar a todos los asalariados posibles, juntarnos con las asociaciones de autónomos para presionar en las negociaciones. Los asalariados somos taxistas, evidentemente no hemos invertido el dinero que sí han invertido los autónomos, pero en Barcelona los asalariados quieren luchar por el taxi. Somos una parte muy importante del sector y los futuros compradores de licencia. El objetivo principal es acabar con la explotación laboral fruto de la especulación.

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