De las 60 marcas de automoción que comercializan coches en nuestro país, 20 de ellas todavía no ofrecen a los conductores un modelo 100% eléctrico, aunque sí lo hacen con gamas híbridas.
Además, marcas como Jeep, Land Rover, Subaru o Suzuki aún no tienen vehículos 100% eléctricos entre sus modelos. Mismo caso que Mitsubishi y Seat que, pese a haber contado años atrás con un vehículo de estas características en su gama, i-MiEV y Mii Electric, respectivamente, ahora mismo no lo comercializan.
En esta radiografía del mercado español, elaborada por el especialista en portales verticales de automoción Sumauto, también queda patente cómo la irrupción del coche eléctrico ha abierto la disparidad de fabricantes eléctricos nativos, es decir, compañías que desde su origen solo venden modelos con esta propulsión. En nuestro país, hay 9 marcas que responden a estos rasgos, como Tesla, Polestar o Aiways, entre otras.
Tendencia al alza
De acuerdo con Anfac, las previsiones señalan un impulso del 29% en las ventas de eléctricos, alcanzando las 30.000 unidades vendidas este año y llegando a 40.000 en 2023.
Además, se prevén nuevos modelos en los siguientes años, como Maserati, que en 2023 lanzará su primer eléctrico y Alfa Romeo hará lo mismo en 2024. En el caso de vehículos de lujo, Ferrari, ya ha anunciado la llegada del primer eléctrico de su historia en 2025. Sin embargo, muchos fabricantes todavía juegan con el margen que tienen hasta 2035, fecha que ha fijado Bruselas como fin de la comercialización de gasolina y diésel.
Según Ignacio García Rojí, portavoz de Sumauto, “históricamente, el sector de la automoción siempre ha estado ligado a las mismas marcas. Con la llegada del coche eléctrico, sin embargo, veremos una cada vez mayor disparidad de fabricantes. De hecho, la menor complejidad del desarrollo de un motor eléctrico respecto uno de combustión favorece la aparición de nuevos actores abriendo todavía más el abanico de posibilidades para el conductor en los próximos años”.