“El desafío más inmediato es el nuevo reglamento de VTC”

La Federación Andaluza de Autónomos del Taxi (FAAT) ya no está presidida por Miguel Ruano. Después de 14 años al frente de la entidad mayoritaria en Andalucía, el representante cordobés ha decidido dar un paso a un lado y dejar su puesto a David Capelo

La Federación Andaluza de Autónomos del Taxi (FAAT) ya no está presidida por Miguel Ruano. Después de 14 años al frente de la entidad mayoritaria en Andalucía, el representante cordobés ha decidido dar un paso a un lado y dejar su puesto a David Capelo, quien es desde hace casi dos años presidente de la Unión Sevillana del Taxi.

Capelo asume la presidencia de la FAAT tras ser ratificado temporalmente por la junta directiva, ya que en 2024 se deberán celebrar elecciones para elegir a nuevos representantes. Ruano, por su parte, permanecerá unos meses como vicepresidente segundo para echar una mano en todo lo que pueda hasta que finalmente deje también su cargo como presidente de la Asociación Provincial de Taxistas de Córdoba (Autacor) en el primer trimestre del próximo año, y abandone definitivamente la representación sectorial.

El nuevo presidente de la FAAT, en esta entrevista concedida a La Gaceta del Taxi, asegura que asume el cargo con mucha ilusión, con ganas de evolucionar hacia una mayor integración y unión del taxi, y con la ambición de afrontar desafíos importantes a corto plazo como es la regulación de las VTC.

La Gaceta del Taxi.- ¿Cómo ha recibido el cambio y la responsabilidad que supone ser presidente de la FAAT?

David Capelo.- Con mucha ilusión, pero a la vez con mucha responsabilidad. Miguel Ruano ha dejado el listón muy alto. Es una persona que cogió la FAAT en momentos muy difíciles y durante muchos años ha sido capaz de unificar muchos criterios y de llevar siempre la junta directiva muy centrada. Queremos seguir la estela de Ruano, y hacer reformas, pero con mesura, sin intentar revolucionar nada. Intentaremos sacar adelante la FAAT, siendo conscientes de que son 34 organizaciones, muchas sensibilidades y distintas realidades. Andalucía es una región muy amplia, con mucha extensión de territorio y no es lo mismo el taxi de las grandes ciudades o de la Costa del Sol, que el de las ciudades de interior. Debemos ser sensibles para que nadie se sienta agraviado en la toma de decisiones y llegar siempre a un consenso.

G.T.- A corto plazo, ¿cuál es el principal desafío que tiene la Federación Andaluza del Taxi?

D.C.- El principal desafío inmediato que tenemos es el nuevo reglamento de las VTC que está preparando el Gobierno Andaluz. A partir de ahí buscamos mejoras en la modernidad del taxi y en la prestación del servicio. Queremos integrarnos todos un poco más a ver si fuéramos capaces de construir una sola radioemisora a nivel andaluz. Sería un reto muy bonito para llevar a cabo. Pero en general lo que queremos es marcar bien los horizontes en un servicio de calidad y que el usuario siempre nos vea como un servicio premium y de excelencia.

Demandas del taxi para regular las VTC

G.T.- ¿En qué fase se encuentra actualmente ese reglamento de VTC?

D.C.- Se está redactando un borrador por parte de la administración, pero todavía no nos lo han hecho llegar. Nos prometieron que nos harían llegar el borrador una vez cumplimentado y a partir de ahí se iniciará un periodo de alegaciones en el que supongo que contarán con la opinión del taxi. Esperemos que no hagan como con el famoso decreto Carazo que aprobaron el año pasado de forma unilateral. Queremos que nos escuchen, que no sea un diálogo de sordos y que no sea la administración la que trace su propio camino sin contar con ninguna opinión.

G.T.- ¿Cuáles son las principales demandas que tiene el taxi para la redacción de este reglamento de VTC?

D.C.- Queremos que se cumplan las pocas condiciones impuestas en el propio Decreto que aprobó la Junta de Andalucía. Es decir, que haya un régimen sancionador eficiente, que las inspecciones se lleven a cabo, que esa limitación de espacio en distancia que ellos otorgaron en lugar de por tiempo se cumpla, y que cumplan las especificaciones técnicas de los vehículos en cuanto a su longitud o la imposibilidad de llevar publicidad en las puertas. También se acordó la no geolocalización de los vehículos antes de la contratación. Queremos que se hagan cumplir estas condiciones con inspecciones y con un régimen sancionador que funcione.

G.T.- Para que se haga cumplir la legislación es necesario un mayor número de inspecciones.

D.C.- Es un verdadero problema. Ahora mismo creo que tenemos siete u ocho inspectores para todo Andalucía. No sale ni a un inspector por provincia. Nos dicen que van a doblar el número de inspectores, pero que haya 15 inspectores no nos soluciona el problema. Queremos que le otorguen competencias a las entidades locales o ayuntamientos para que puedan regular en número y forma el servicio de VTC en suelo urbano.

G.T.- El decreto aprobado por el Gobierno de España a finales del mes junio tras la sentencia europea del 1/30 hacía referencia a habilitar a las entidades locales a regular las VTC por razones de interés general.

D.C.-Si. También en esa sentencia había cosas que han pasado desapercibidas y que encuentro incluso más importantes que aquello en lo que se hace referencia respecto al medioambiente o esa capacidad de regular por la saturación del espacio. El hecho de que se haya nombrado al taxi como un servicio de interés público provoca que las entidades locales pueden regular las VTC para garantizar el buen funcionamiento de ese taxi de interés público. Ahí los ayuntamientos podrían regular el número de VTC, o al menos tener un control de cuántas operan en su suelo urbano ya que a día de hoy ningún ayuntamiento es capaz de decir cuantas VTC hay en su ciudad.

G.T.- Con respecto al taxi, ¿qué mejoras cree que se podrían introducir en Andalucía?

D.C.- Poco a poco debemos ir dando pasos hacia la integración. En Sevilla, por ejemplo, existen dos emisoras y poco a poco se tendrían que ir integrando hacia un servicio de app. Por otro lado, el precio cerrado tendrá que ir avanzando porque es una realidad y tenemos que hacerlo de manera que el taxi no sea siempre el perjudicado. Debemos ofrecer un precio real pero que el algoritmo respete las tarifas vigentes y eso no sea una subasta donde siempre pierda el taxista. Queremos que haya un equilibrio y si ponemos un precio cerrado no pueden otras plataformas o emisoras ofrecer precios por debajo de la tarifa oficial.

G.T.- ¿Cómo valoraría la situación actual de la Federación Andaluza del Taxi?

D.C.- La Federación Andaluza siempre ha representado prácticamente el 90% del taxi andaluz. Estamos representados en las ocho provincias, con todas las capitales y también contamos con ciudades tan importantes como Jerez, Algeciras, Torremolinos o Motril. La Federación goza ahora mismo de muy buena salud, con una junta directiva que ha mostrado su confianza en que fuera la persona que liderase ahora la organización. Me tomo esto como un desafío personal, pero esto para la Unión Sevillana del Taxi también es una carga de trabajo extra. Vamos a valorar de aquí a febrero cómo se va dando y mi idea es convocar en febrero una Asamblea Extraordinaria y ser ratificado o no en el puesto.

G.T.- La FAAT pertenece, además, a la Asociación Nacional del Taxi (Antaxi).

D.C.- Si y tenemos la firma voluntad de seguir contribuyendo a la Asociación Nacional en todos los procedimientos. El camino de Antaxi es cada vez más fuerte y consolidado. Por eso quiero lanzar un mensaje a todos los compañeros de unidad, quiero que sepan que la FAAT está abierta a todos y si algún municipio se quiere integrar, lo único que va a encontrar son facilidades. La unión hace la fuerza y nos hará más fuertes de cara a defender nuestros derechos y que sigamos siendo vistos por los ciudadanos como un servicio de primera.

Javier Izquierdo