“Me marcho agradecido y satisfecho por mi trabajo”
En octubre de 2009 Miguel Ruano fue elegido como presidente de la Federación Andaluza de Autónomos del Taxi (FAAT). Una época convulsa en el sector, con una reciente Ley Ómnibus a punto de aprobarse por parte del Gobierno de España que cambiaría la movilidad y el estatus del taxi en nuestro país. Desde entonces, manifestaciones, protestas, reuniones con la administración. No han sido catorce años fáciles para representar al taxi, y Ruano ha sido la cabeza visible del taxi andaluz durante este tiempo.
Ahora, después de casi veinte años en la representación del sector, ya que antes de presidente de la andaluza, Ruano fue vicepresidente y presidente de la Asociación Provincial de Autónomos del Taxi de Córdoba (Autacor), decide dar un paso a un lado para que sean otros los que se ocupen de la representación del colectivo.
“Durante el primer trimestre de 2024 se celebrarán elecciones en la asociación de Córdoba y no me presentaré. No lo quería dejar de forma brusca, se lo anuncié a mis socios y creo que ya he hecho mi contribución al colectivo”, indica Ruano. “Empecé con cuarenta años y lo voy a dejar con sesenta y quiero tener cinco años más tranquilos antes de mi jubilación”.
En esa idea de no dejar las cosas de forma precipitada, y teniendo en cuenta que los estatutos de la Federación Andaluza establecen que si no eres presidente de la entidad local no puedes dirigir la organización regional, Ruano quiso que el relevo en la FAAT se produjera unos meses antes. Por ese motivo ha dejado la presidencia y permanecerá como vicepresidente segundo durante unos meses para colaborar en lo que se pueda. “Si se necesita mi ayuda o asesoramiento me tienen a su disposición”, afirma.
La FAAT, en buenas manos
Preguntado por su sustituto, David Capelo, Miguel Ruano se muestra con mucha confianza. “Es una persona joven pero experimentada, que se expresa maravillosamente y con claridad en sus ideas. Lo demuestra que haya sido elegido por el taxi de Sevilla. Sus ideas son claras y futuristas en cuanto a lo que significa el taxi. Consciente de la situación de presente, sabe la situación particular de Andalucía. Estoy convencido de él y me da mucha tranquilidad”, explica Ruano.
“Estoy muy orgulloso del apoyo que siempre he tenido de todas las organizaciones. Ha habido momentos difíciles, la multiplicación de las VTC o la llegada de Uber, pero también ha habido momentos gratos como fue participar en la legislación de un reglamento para el taxi que se cocinó artículo a artículo en más de una veintena de reuniones”, sostiene un Miguel Ruano que se muestra satisfecho del trabajo realizado y muy agradecido a todas las organizaciones a las que ha tratado de ayudar siempre que ha podido con cualquier conflicto y de las que siempre guardará un gran cariño./TAMBIÉN ES NOTICIA