Ante el Reglamento de ordenación de la actividad de transporte urbano discrecional con conductor que prepara el Ayuntamiento de Barcelona y que regulará el número de autorizaciones de vehículos de alquiler con conductor (VTC) en relación con el taxi, las críticas del sector de VTC no se ha hecho esperar y consideran que esta normativa pone en peligro su modelo de negocio.
Según explica El Español, ante la iniciativa del gobierno de Ada Colau, que establecerá que en ningún caso, el número de autorizaciones vigentes en cada momento podrá superar el ratio de 1 VTC por cada 30 taxis, algunos dirigentes de empresas de alquiler de estos vehículos señalan que el Ayuntamiento de Barcelona está asumiendo unas competencias que no le corresponden. Para los dirigentes de las VTCs, este reglamento impedirá el desarrollo de empresas como Uber o Cabify en la Ciudad Condal.
Las propias fuentes del sector de las VTC consultadas por el citado medio no descartan que pueda haber un movimiento del Gobierno central o de la propia Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y que recurran esta normativa ante el Tribunal Supremo. En cualquier caso, parece claro que solicitarán la suspensión temporal de la norma.
Desde el Ayuntamiento, por su parte, han asegurado estar tranquilos dado que sus servicios jurídicos habrían analizado el texto en varias ocasiones y no hay opción para que se admita a trámite un recurso en su contra.