Después de cuatro meses, sigue sin aclararse el asesinato del taxista de Salamanca

La investigación por la muerte a tiros del taxista de Salamanca Ángel Sánchez Anaya, de 60 años, continúa abierta cuatro meses después de que se produjera en un barrio de las afueras de la capital salmantina y sin que haya detenidos, aunque con avances en las pesquisas.

La madrugada del 27 de abril moría el taxista salmantino, al alcanzarle los disparos realizados desde el lado izquierdo del vehículo, un Citroën Picasso.Fuentes de la investigación consultadas por la agencia Efe han señalado que la pistola fue disparada por una persona, aunque en el vehículo, de gran cilindrada, iban dos.A la vista de estos datos, la Policía ya tiene "ideas" sobre la autoría de los disparos, aunque han preferido mantenerlas en secreto dado que el juez que investiga el asesinato del taxista ha ampliado el secreto de sumario.

 Pese a esta "claridad" en la línea investigadora, según han señalado fuentes policiales, las dudas surgen sobre los motivos que tenían los supuestos sicarios para acabar con la vida del pasajero. Fuentes de la investigación han señalado que en las últimas semanas se ha producido un mayor cerco sobre los supuestos sicarios, una vez que huyeron, hacia el norte de España, tras realizar los disparos.