El Gobierno de España tiene previsto llevar a cabo una reforma de la jubilación anticipada, y está contemplando la posibilidad de ampliar los colectivos de trabajadores que pueden retirarse antes de su ejercicio laboral. Para ello, van a estudiar y analizar las profesiones que, por sus características, puedan ser consideradas peligrosas, penosas o con alto índice de siniestralidad.
Las asociaciones representativas de autónomos tienen mucho que decir en este punto, ya que, como principal novedad en esta modificación legislativa, pueden impulsar en una primera fase preliminar que se revisen y se tengan en cuenta coeficientes de determinadas profesiones para que se les pueda aplicar, en su caso, la jubilación anticipada.
Es en este punto donde el sector del taxi quiere que se le tenga en cuenta y que los profesionales, sometidos a largas jornadas de trabajo con mucho estrés y en la mayoría de los casos durante muchos años, puedan optar a la jubilación anticipada sin ser penalizados.
Celia Ferrero, vicepresidenta de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA)
Celia Ferrero, vicepresidenta de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), en declaraciones ofrecidas a La Gaceta del Taxi, ha explicado que la modificación de la jubilación anticipada es un asunto que está actualmente en la Mesa de Diálogo Social. “Se ha avanzado mucho y viene a establecer coeficientes reductores para aquellas actividades que tengan carácter de penosidad, siniestralidad, toxicidad o salubridad”.
La representante de ATA recuerda que el trámite para que se incluya a determinados sectores se ha de iniciar a través de las asociaciones representativas de autónomos, la patronal o los sindicatos. “Se debe hacer una solicitud tras escuchar al colectivo, especificando el por qué consideran que deben acceder a estos coeficientes reductores. Posteriormente se pasa por una serie de informes hasta que se da el visto bueno”, indica.
“Se tiene que tratar con cada una de las actividades o colectivos específicos. La novedad de esta modificación es que se inicia a través de las asociaciones de autónomos en el caso de los trabajadores por cuenta propia y, además, la otra novedad es que se considera, no ya solo la siniestralidad, sino que se tienen en cuenta factores como la penosidad”, explica Ferrero.
El papel de las asociaciones de autónomos
“Se van a mirar varios indicadores para establecer cuáles serían los coeficientes reductores. Y en esta ocasión se van a considerar otros criterios como la penosidad, y no solo la siniestralidad”, insiste Ferrero. Hay que recordar en este punto que la penosidad es la incidencia de baja relacionada con el puesto de trabajo. Es decir: el volumen de enfermedades profesionales o la incidencia de baja que existe en una actividad concreta y relacionada directamente con esa actividad.
Desde la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), su presidente Eduardo Abad afirma que “urge establecer un catálogo que determine aquellas actividades que desarrolla el colectivo de autónomos, consideradas penosas o de peligrosidad, para que puedan ser incluidas en la reforma de la jubilación anticipada”. En este sentido, hace referencia a aquellas profesiones con largas jornadas laborales con falta de control horario y que no tienen ninguna regulación.
Eduardo Abad, presidente de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA)
“No entendemos qué hace un autónomo subido a un andamio a los 66 años, ni como un taxista de avanzada edad hace jornadas de más de 14 horas”, explica Abad, que se frena a la hora de mencionar a otras muchas profesiones que, por su naturaleza, “se convierten en actividades peligrosas”. “Los autónomos también somos trabajadores y no permitiremos que, una vez más, se produzcan diferencias con connotaciones negativas entre el trabajo por cuenta ajena y el trabajo por cuenta propia”, aseguran desde UPTA.
El taxi, perfectamente legitimado
Centrándonos en el sector del taxi en particular, Celia Ferrero de ATA lo tiene claro: “El taxi estaría perfectamente legitimado para, a través de las organizaciones representativas de autónomos, iniciar este trámite. Se tendría que poner en contacto con las asociaciones e impulsar la reforma”, explica la vicepresidenta de ATA, que recuerda que es una “reivindicación de hace años en el sector”.
“Nos gustaría que en la propuesta se tenga en cuenta la edad como un factor de penosidad, sin que haya que considerar las bajas y su relación con el trabajo. Queremos ir más allá, y que la propia edad sea de por si un factor de penosidad en ciertas actividades como puede ser el taxi en el que hay que pasarse tantas horas detrás de un volante”, subraya Ferrero, que hace hincapié también en la discriminación que sufre el taxi con otros transportistas, como los de mercancías, que sí que pueden acceder a la jubilación anticipada. “No lo entendemos y no tiene sentido”, sentencia.
Por su parte, el presidente de UPTA asegura que en su asociación tienen claro que “hay sectores de actividad que tienen una situación llamada de penosidad”. “Las personas que trabajan durante un largo periodo de tiempo sentadas al volante como pueden ser los transportistas tienen más que justificado el acceso a una jubilación anticipada, entre otras cosas porque la situación musculoesquelética de quienes están al volante se deteriora”, explica Abad, que insiste también en que hay un deterioro psicosocial que afecta a la salud de esos trabajadores, con largos periodos de tiempo y sin descansos.
“A diferencia de los transportistas de mercancías, el taxista es un autónomo que no tiene tacógrafo, es decir, no tiene los tiempos de trabajo establecidos. Los taxistas, para poder cumplir con los objetivos económicos y para que su actividad sea rentable trabajan largos periodos diarios de actividad que en el mejor de los casos no baja de las 11 o las 12 horas”, señala el representante de UPTA.
“El sector del taxi tiene unas condiciones de trabajo realmente duras y es un colectivo que tiene que estar incluido dentro de las profesiones que deben tener acceso a la jubilación anticipada a través de los coeficientes reductores. El taxi, además, reúne los requisitos de peligrosidad puesto que los profesionales están en contacto continuado con otros vehículos que transitan por la vía pública, sometidos a estrés, falta de sueño y con riesgo de sufrir enfermedades psicosociales”, analiza Eduardo Abad.
La posición de las asociaciones del taxi
Desde el taxi, las principales organizaciones representativas a nivel nacional también apuestan porque se tenga en consideración al sector a la hora de incluirlo entras las profesiones a tener en cuenta para la jubilación anticipada. “Este trámite como autónomos que somos la mayoría es más complejo que si fuéramos trabajadores asalariados. Pero se deben aplicar coeficientes reductores en el taxi y que se nos tenga en consideración en la jubilación anticipada. El Ministerio nos debe tener en cuenta, más allá de si consideren al taxi una profesión penosa o no. Es hora de que el Ministerio de Trabajo aborde este asunto”, explicó a nuestro medio Julio Sanz, presidente de la Asociación Nacional del Taxi (Antaxi).
Por su parte, Alberto de la Fuente Miñambres, presidente de la Federación Española del Taxi (Fedetaxi), aboga para que, en cualquier caso, esta jubilación anticipada tenga un carácter voluntario, aunque es una medida que se implantaría con años de retraso porque es una demanda que tiene mucho tiempo en el sector del taxi. El representante de Fedetaxi hace hincapié en el agravio comparativo que tiene el taxi con los transportistas de mercancías, o incluso con otras profesiones que no demandan de la exigencia que por ejemplo afrontan los taxistas en una gran ciudad. “Queremos que se tenga en cuenta al taxi en la jubilación anticipada y que no se le penalice al taxista que opte por esta opción”, aclara el presidente de Fedetaxi.
En cuanto a la tramitación de la norma, desde ATA confían en que no tarde mucho, pero si que dejan claro que 2024 está siendo un año políticamente convulso y las campañas electorales catalanas y europeas pueden hacer que se vaya retrasando porque nadie quiere dar un paso en falso. “Lo bueno es que en el momento en que salga, se inicia el trámite, hay plazos y va a dar mucha agilidad y una vez que se hacen las solicitudes de patronal, sindicatos o asociaciones habrá unos plazos y el procedimiento será bastante ágil”, anuncia Ferrero.
Por otro lado, UPTA hablar primero de conseguir que el procedimiento, que ahora mismo aún está en esa fase preliminar, se abra para que se inicien las distintas negociaciones con el Ministerio y se ponga encima de la mesa las situaciones de los distintos colectivos. Una vez suceda ese paso, se iniciará una negociación para la jubilación anticipada que esperan tener cerrada a lo largo de este año ya que es fundamental “para el taxista y también para otras actividades económicas”.
Javier Izquierdo