El taxi rural en Castilla-La Mancha reclama ayudas
Más del 70% de las licencias de taxi de Castilla-La Mancha trabaja en el ámbito rural prestando servicios en núcleos que no son de gran magnitud. Manuel García Naharro, representante de los taxistas castellanomanchegos, es consciente al hilo del proceso de descarbonización que, a día de hoy “es complicado trabajar con vehículos que no sean diésel” em entornos eminentemente urbanos.
“No tenemos ayudas directas al sector por parte de las administraciones”, explica Naharro que, con datos que ha recopilado del sector en su región, nos ofrece una imagen real de la situación del taxi en la región.
En Ciudad Real, actualmente la flota se compone de únicamente un taxi eléctrico, dos taxis GNC, un taxi GLP, 11 híbridos y 32 diésel. En Guadalajara, la situación no es muy diferente, con un taxi GLP, 12 coches híbridos, un coche eléctrico y hasta 30 vehículos de combustión diésel. Por su parte, en Albacete, la última provincia de la que recogió datos, 80 taxis son híbridos, 2 son híbridos enchufables, 7 son GLP y 18 taxis están propulsados por combustible diésel. Todos los que trabajan directamente en pueblos, son vehículos diésel./TAMBIÉN ES NOTICIA