El piloto alemán de la escudería Mercedes consiguió una impecable victoria en el brasileño circuito de Interlagos saliendo desde la primera posición de la parrilla. Con ésta, Nico Rosberg consigue su segunda victoria consecutiva -la quinta de la temporada- y se adjudica de forma definitiva el subcampeonato.
Parece que la presión afecta en el rendimiento puro de algunos pilotos de una forma distinta. Son muchos los ejemplos de pilotos que cuando realmente se exige dar más de lo que se puede, flaquean. Ese puede ser el caso de Rosberg. El piloto alemán ha sufrido durante toda la temporada la superioridad de su compañero de equipo y nuevo campeón del mundo, Lewis Hamilton.
Sin embargo, tanto en el Gran Premio de México como en el disputado ayer en Brasil, se ha visto a un Nico Rsoberg verdaderamente rápido y consistente. Hamilton sólo ha podido limitarse a seguir a su compañero hasta la meta para completar el enésimo doblete de Mercedes en lo que va de campaña.
Uno de los jefes de Mercedes, el ex piloto Niki Lauda, reconoció ayer mismo que el alemán “se siente liberado” y admitió que ahora mismo, “es el hombre más fuerte” de la parrilla.
El tercer escalón del podio volvió a estar reservado para Sebastian Vettel. Ha sido una gran temporada la del tetracampeón del mundo alemán, pero, sin embargo, no parece suficiente ser el segundo casi siempre para una escudería tan ambiciosa como Ferrari.
Los españoles, sin suerte
Carlos Sainz, que había acabado la clasificación en la posición undécima, tuvo problemas antes de la carrera y se vio obligado a salir desde el pit lane. Sin embargo, los fallos mecánicos no desaparecieron pues no logró completar ni una sola vuelta.
La suerte de nuevo se volvió en contra del piloto madrileño que está viendo como todos los problemas técnicos se ciernen sobre él mientras su compañero de equipo en Toro Rosso, Max Verstappen puede demostrar su valía al mando de un Fórmula 1.
El caso de Fernando Alonso es el de la resignación más absoluta. En la sesión de clasificación del sábado protagonizó dos de las imágenes más curiosas de la temporada. La primera, nada más abrirse la sesión, cuando el Mclaren volvió a fallar y se vio obligado a bajarse del mismo. El asturiano no dudó y se sentó en una especie de silla playera desde la cual contempló un rato de la sesión a la luz del sol.
Pero no acabó ahí el show de la desolación, ya que en la vuelta a los garajes se encontró con su compañero de equipo en Mclaren, Jenson Button, y ambos dos subieron al podio para tomarse una fotografía para el recuerdo en la que ha sido la temporada más desastrosa en sus carreras
En cuanto al rendimiento de los coches de Woking, la carrera fue otro ejemplo de que se encuentran en un año de pruebas en el que los resultados han sido paupérrimos. Sin embargo, los mensajes son positivos de cara el año que viene. Tanto es así que el propio Alonso aseguró que, Mercedes está en otro planeta, sabemos que hay que hacer algo extraordinario para batirles y por eso estoy en Mclaren-Honda”.