Disputadas las tres primeras carreras del año, en las que el actual campeón del mundo no ha hecho otra cosa que ver como su compañero de equipo en Mercedes, Nico Rosberg, celebraba cada Gran Premio, Lewis Hamilton aterriza en Rusia con la intención de cambiar la tendencia y comenzar su remontada.
36 puntos son los que separan a los dos pilotos de las “balas plateadas” en la clasificación mundial, y esta primera aproximación a territorio europeo debería marcar un antes y un después en el campeonato ya que, de otro modo, la confianza de Rosberg iría todavía más en aumento.
La principal novedad que se podrá ver en el circuito internacional de Sochi es una especie de cúpula que llevarán los pilotos de Red Bull en alguna vuelta no cronometrada de los entrenamientos libres. Se trata de una alternativa a lo que ya propuso Ferrari en los test invernales y que, desde luego, parece más estética.
La Fórmula 1 lleva tiempo probando diferentes iniciativas para que la parte superior del cuerpo de los pilotos esté más protegida de cómo está en la actualidad, y parece ser que desde el equipo de la bebida energética han encontrado una solución.
Al respecto de Red Bull, precisamente para esa escudería corre el que durante este fin de semana se convertirá en ídolo local, Daniil Kvyat, quién además lo hará con la moral por las nubes después del podio cosechado en el Gran Premio de China. En un principio, en base a las previsiones, el de Sochi es un circuito donde la potencia del motor cobra más importancia, pero Red Bull ha demostrado tener una eficiencia aerodinámica muy superior a la gran mayoria de la parrilla y no sería descabellado pensar que pudieran, de nuevo, ocupar algún lugar del cajón del podio.
Con respecto a los pilotos españoles, Fernando Alonso se subirá ya sin ningún tipo de problema físico a su Mclaren. El piloto asturiano ha vuelto a ser protagonista en los medios en las fechas previas al fin de semana en Sochi pues en una entrevista confesó que, “en igualdad de condiciones, ganaría a cualquiera”. Eso es precisamente lo que esperan sus aficionados, un coche que le permita estar en esas condiciones para poder pelear con los mejores, puesto que tal y como explicó el bicampeón español, “la Fórmula 1 necesita de la lucha entre los grandes nombres”.
Carlos Sainz, por su parte, continuará con su labor de meter a su Toro Rosso en la lucha por los puntos. De nuevo su principal rival será su compañero de equipo Verstappen, que le aventaja en nueve puntos en la clasificación mundial.
En cuanto a las características técnicas del circuito, hay que destacar que se trata de una pista muy joven –el primer Gran Premio de F1 se disputó en 2014-, con un total de 19 curvas repartidas a lo largo de sus de 5.872 metros de longitud. El domingo, a las 14:00 horas –hora española- los pilotos iniciará una carrera que constará de 52 vueltas.