El STAC defenderá el Reglamento de emisoras frente a la CNMC en lo que el presidente del Sindicat, Luis Berbel, ha calificado de nuevo intento de “desregular” el sector. Para Berbel es importante que entre en vigor este decreto que pone orden a un caótico sistema de radiotaxis y confía en que finalmente la justicia atienda las razones de los profesionales. Además, cree que este es el momento de pelear en los juzgados “porque son las leyes las que rigen nuestro camino y los jueces van a ser determinantes”, ha insistido.
Gaceta del Taxi.- La CNMC ha recurrido el conocido como Reglamento de emisoras y el STAC se ha personado junto con la Generalitat para defenderlo. ¿Por qué es importante que entre en vigor esta normativa?
Luis Berbel.- Esta es una de las normativas por las que más hemos peleado en los últimos años. La Generalitat tenía como principal objetivo con este decreto regular la actividad de mediación en la contratación y la comercialización de los servicios de taxi, incluyendo tanto las radioemisoras, los sistemas de telefonía, como las nuevas aplicaciones para dispositivos fijos o móviles. Es, en resumen, una herramienta que armoniza la actual situación y que nos dice cómo tienen que trabajar las emisoras, además de poner orden. Lo que se regula es que las emisoras cumplan de verdad con los servicios ofertados.
G.T.- Ha mencionado que es importante que los radiotaxis cumplan con lo ofertado, ¿en qué sentido?
L.B.- El escenario de radioemisoras en Catalunya, y en Barcelona en particular, es amplísimo y hay emisoras con flotas más grandes y otras más pequeñas. Esta realidad provoca que estemos mal organizados de cara a competir. Porque una forma de hacer frente a la competencia es a través de las emisoras, porque de forma individual no vamos a conseguirlo. Y por supuesto sin olvidarnos de que de esta manera daremos un mejor servicio al usuario, que al final es nuestra razón de ser.
Por eso queremos que se concentren emisoras o bien a través de la fusión o a través de centros de llamadas, porque de esta manera se daría una mejor cobertura a los usuarios. Da igual que sea de una compañía u otra, lo que queremos es que el usuario siempre tenga disponible un taxi y si yo mañana no puedo cubrir el servicio que me lo cubra la compañía de al lado.
G.T.- Esta no es ni la primera ni la segunda vez que la CNMC interpone un recurso contra una normativa que afecta directamente al taxi, ¿cuál cree que es el objetivo de competencia con respecto al sector?
L.B.- El objetivo de la CNMC es desregular el sector del taxi a través de diferentes vías, ya sea de forma directa o indirecta. Además de este recurso, tienen abiertos otros dos procesos judiciales también contra las ordenanzas de Málaga y Córdoba, además del contencioso contra el ROTT que se dirimirá en el Supremo. Lo que quieren es que el mercado sea libre y como consecuencia de liberalizar el transporte, se liberalizará también el taxi. Y buscarán otras vías si así llegan a su objetivo.
G.T.- ¿Y qué argumento esgrimen desde el sector para defenderse?
L.B.- Desregular el sector del transporte es perjudicial para el usuario, y por eso nosotros apostamos por un sector regulado, de calidad. La CNMC nos acusa de querer mantener el monopolio y rechazar la competencia, pero nosotros ya tenemos competencia, somos 60.000 licencias compitiendo cada día en la calle por dar el mejor servicio. No podemos olvidar que siempre han existido VTCs y otros operadores y hemos competido sin problema.
El problema de desregular nuestro servicio es que ya sabemos claro lo que ha sucedido en otros países. A diferencia de lo que ellos venden no ha habido bajada de precios, sino que estas aplicaciones bajan los precios al principio para conseguir cuota de mercado y después, una vez lo tienen, y han conseguido eliminar o casi eliminar el sector del taxi, ponen en práctica lo que denominan tarifas dinámicas en función de la oferta y la demanda existente. Todo esto ofrece muy pocas garantías de cara al usuario. Por el contrario nuestras tarifas son aprobadas cada año por los ayuntamiento, pero también por las propias asociaciones de consumidores, y pasamos un trámite para renovar nuestras tarifas y las mantenemos pase lo que pase en la calle.
G.T.- Este conflicto no es el único que mantiene en los tribunales el STAC, ya que recientemente se aceptó su personación en el conflicto contra Ares Capital. ¿Cree que es el momento del que taxi luche en los juzgados?
L.B.- Al final la batalla en los juzgados es la más importante para el sector, porque son las leyes las que rigen nuestro camino. Podemos salir a la calle, protestar, pero al final los jueces van a ser los que determinen si las leyes que existen están bien o mal puestas o si se cumple con el reglamento o no. Es ahí donde está buena parte del futuro del sector. El sector del taxi debe velar por el cumplimiento y respeto de la normativa, y trabajar en ella.
Es la batalla más importante y vamos a estar ahí en todas aquellas que se han planteado y que se puedan plantear. Porque la clave es ofrecer un servicio regulado y de calidad.
Creemos que personarnos en el conflicto abierto contra Ares Capital es una vía de intentar paralizar el proceso, para que se nos tenga en cuenta a la hora de resolver judicialmente, porque somos los primeros afectados en las posibles nuevas autorizaciones que se puedan dar. Ese es el primer argumento que hemos dado.
Y el juzgado nos ha dado la razón, porque ha valorado que nosotros tenemos mucho que decir en este caso porque nos va a perjudicar si sigue así.
PUEDES LEER LA ENTREVISTA COMPLETA EN NUESTRO NÚMERO DE AGOSTO