AMT apuesta por el taxi eléctrico

Agilizar los procesos de homologación de nuevos vehículos, trabajar en una tarifa más flexible y eliminar la actual regulación horaria fueron algunas de las cuestiones que se abordaron durante la última asamblea de la Asociación Madrileña del Taxi, celebrada el pasado 30 de mayo. Una sesión en la que se aprobaron todos los puntos del día y en la que también se presentó a los socios un proyecto “pionero” para la creación de una infraestructura de carga rápida en Madrid de cara a una futura flota eléctrica. 

 

Enrique Gutiérrez, vocal 1º de la asociación, recordó que aunque todas las administraciones públicas están empujando al taxi hacia el vehículo eléctrico, la falta de una red de carga adecuada está suponiendo un importante lastre a la hora de que el taxista invierta en este tipo de modelos cero emisiones. 

 

Adelantándose a este futuro eléctrico, desde AMT creen que el taxi, -“este es un proyecto para todo el sector, no solo para nuestros socios”-, debe tomar las riendas para conocer y negociar unas tarifas adecuadas y diseñar una infraestructura que sea efectiva para su día a día. “Porque si no lo hacemos nosotros, nos van a imponer una infraestructura similar, aplicándonos un precio y un lugar para la recarga”, aseguró el propio Gutiérrez. 

 

Con esta red, se pretende cubrir zonas estratégica en puntos situados en parkings subterráneos en Chamartín, Nuevos Ministerios, Atocha, Plaza de los Mostenses o en Miguel Hernández. El objetivo final sería que el taxi dispusiera de hasta 570 cargadores, pero se necesita “que exista una demanda real”. 

 

Con ese objetivo, AMT ha solicitado en varias ocasiones al Ayuntamiento que permita a los vehículos eléctricos un régimen de trabajo diferente, o bien 24 horas, “algo que sabemos que no vamos a conseguir porque desde Federación Profesional están totalmente en contra”, o un formato similar al del eurotaxi. “No queremos subvenciones, no queremos paradas especiales, queremos que nos permitan trabajar más para que el desembolso que supone la compra de uno de estos vehículos sea amortizada lo antes posible”. Sin embargo, esta es una opción que el Ayuntamiento ha rechazado completamente y las alternativas que se les proponen “son insuficientes”.

Más rapidez para autorizar

nuevos modelos

Para Felipe Rodríguez Baeza, presidente de la asociación, una de las prioridades de su asociación es conseguir agilizar el proceso de homologación de nuevos vehículos. Para el presidente, la actual relación de modelos autorizados para el servicio de taxi es “insuficiente”. “En lo que llevamos de año solo se han homologado dos modelos nuevos”, lamentó Rodríguez Baeza.

 

Una cifra escasa a pesar del cambio de normativa que, en el papel, iba a hacer más fácil la incorporación de nuevos modelos al taxi y que en la práctica no está siendo efectiva. 

Para reconducir esta situación y agilizar este proceso, AMT ha propuesto al Ayuntamiento dos fórmulas. La primera, “más rápida y efectiva”, consistiría en autorizar versiones de modelos ya homologados con el Ayuntamiento. Tal y como expuso el vicepresidente de AMT, Román García Polvorinos. “Solo sería necesario presentar el catálogo, y el Ayuntamiento se ha comprometido a autorizar únicamente ese modelo para el taxista que lo presente”. Porque, como añadió García Polvorinos, con esta solución el “problema de la toma de señal quedaría resuelto, al ser una versión de un modelo previamente autorizado”. 

 

La segunda opción, más lenta y complicada, sería autorizar coches que no lo están todavía. Para conseguirlo sería necesario contar con toda la documentación necesaria que pide la Comunidad de Madrid en cuanto a medidas y toma de señal. Respecto a esto último, sería posible presentar dicha documentación “autorizada en otras comunidades autónomas” donde dicho modelo ya esté dando servicio como taxi. “Es un camino lento, pero posible”, insistió. 

 

 

LA CRÓNICA COMPLETA, EN NUESTRO PRÓXIMO NÚMERO DE JUNIO