De forma preventiva, dado que aún no se han alcanzado los umbrales para declarar un episodio oficial de contaminación, la velocidad en las vías rápidas del área metropolitana de Barcelona se ha reducido hoy a los 90 kilómetros por hora ante el incremento de los niveles de polución.
En concreto, la provincia barcelonesa ha experimentado un aumento de las partículas en suspensión PM-10 que, unido al anticiclón, han provocado que se implante esta medida a modo de aviso preventivo.
Aunque desde el Servei Català de Trànsit (STC) se haya decidido aplicar la reducción de velocidad en los 40 municipios del área que comprende las comarcas del Vallès, el Barcelonès y el Baix Llobregat, aún no se han superado los niveles para emitir un aviso de episodio de contaminación, que obligaría a adoptar otras medidas de carácter industrial.
El tráfico no ha registrado mayores problemas circulatorios a primera hora de la mañana a pesar de esta reducción de la velocidad en las vías rápidas de Barcelona. Estas restricciones por contaminación se suman a las ya adoptas con anterioridad en Madrid y en otros lugares como Oviedo.