Manuel Chorén, presidente de la Cooperativa de Taxistas de Vigo (CTV) y del Radiotaxi ha decidido denunciar y combatir la práctica ilegal de alquiler de licencias y exige al Concello que controlen para que las trabaje quien tiene que trabajarlas” y, llegado el caso, “se retiren”.
La falta de síntomas de recuperación y la necesidad de poner orden ha decidido a la Cooperativa de Taxistas de Vigo a meter mano al “problema” del alquiler de licencias que en declaraciones al Faro de Vigo, su presidente, Manuel Chorén, reconoce tan “gordo” como espinoso.
Hace unas semanas, explican desde la Cooperativa, se informó al Concello (organismo responsable de las concesiones) que existían unas 30 licencias arrendadas a cambio mensualidad de unos 500 euros/mes y exigen a la concejalía de Tráfico que “se controlen para que las trabaje quien tiene que trabajarlas” y, llegado el caso, “se retiren”.
Práctica prohibida
La legislación sobre el
La única potestad que deja en manos del propietario es trabajar “en conjunto mediante la contratación de conductores asalariados”. El decreto contempla incluso como causa para “revocar y retirar” la concesión, “el arrendamiento, alquiler o apoderamiento de las licencias”., recuerda en al diario vigués.
Difícil de demostrar
La dificultad para demostrar que un taxi está alquilado sirve de paraguas a quienes se deciden a contravenir
También existen unas reglas no escritas: ll propietario deja la licencia en manos de otra persona, “se desentiende por completo de ella”, y a cambio recibe cada mes 500 euros “limpios de polvo y paja”. “El alquilado tiene que hacerse cargo de todo: reparaciones, gasolina… su deber es dejar el dinero limpio y punto”, explican desde la profesión.
Lo más extendido – continúa- es que ni siquiera la persona que paga por la licencia se siente al volante del taxi. Asume el papel de “mediador” y contrata, a su vez, a uno o dos asalariados que ruedan en la calle con el vehículo. El “abandono” del dueño de la licencia es tal que, aunque esos empleados trabajan oficialmente para él, los costes y toda la tramitación de su cotización a
Fuentes del sector explican también cuál es el papel de cada una de las tres partes que intervienen en el proceso de alquiler de la licencia: el propietario, que por una u otras razones ya no la trabaja directamente; el mediador, que se ocupa directamente de gestionar varias licencias ajenas; y finalmente el asalariado que trabaja el taxi si soporta la peor parte. Desde el propio colectivo reconocen a este diario que “para sacarle rentabilidad muchas veces se cotiza por ellos dos o cuatro horas y después se les tiene trabajando en la calle durante jornadas de 12 horas”.
Una lacra que se extiende
La Cooperativa de Taxistas de Vigo es la primera organización que ha decidido denunciar públicamente esta actividad ilegal de subarriendo en su ciudad. Pero la práctica no es exclusiva de Vigo, de un tiempo a esta parte, y así la han reconocido a este medio algunos taxistas, se está haciendo lo mismo en otras cuantas ciudades mucho más grandes y con más licencias. Hasta ahora, salvo la Cooperativa de Vigo, ninguna otra asociación ni organización del taxi admite la existencia de esta práctica ilegal, tal vez lo hagán a partir de ahora siguiendo del presidente Manuel Chorén.