La Operación Jaula puesta en marcha para tratar de detener a Carles Puigdemont y que ha implicado un amplio dispositivo policial con controles en carreteras, cortes e inspecciones de vehículos en toda Cataluña ha tenido su repercusión directa en el taxi, según han informado desde Élite Taxi Barcelona. Una de las principales consecuencias es que las dos terminales del aeropuerto Josep Tarradellas-El Prat se han quedado sin taxis ante la imposibilidad de los taxistas de acceder a las zonas de recogida y dejada de viajeros.
Los Mossos activaron, primero en el área de Barcelona y posteriormente en toda Cataluña, los controles en las principales vías y carreteras con el fin de localizar y detener al expresidente de la Generalitat, lo que ha desembocado en importantes retenciones de tráfico en toda la región. Muchos taxistas decidieron volver a sus casas ante la imposibilidad de trabajar durante las hora que ha durado activo este dispositivo especial.