La Unión de Trabajadores Autónomos del Taxi (UTAT) de Tenerife través de su presidente Carmelo Peña ha hecho un llamamiento a los taxistas tinerfeños para secundar las movilizaciones previstas para el 21 y 25 de octubre como protesta por las graves dificultades que atraviesa el sector.
El presidente de UTAT explicó en los micrófonos de Radio San Borondón que los profesionales del sector comenzarán las protestas previstas este próximo lunes 21 de octubre a través de un paro de dos horas y media a partir de las 12:00, momento que aprovecharán para realizar una marcha de taxis por la ciudad.
Explicó también que la segunda de las jornadas de protestas será el viernes 25, día en el que igualmente se platea una suspensión del servicio, pero en este caso de unas siete horas a partir de las 8:00 de la mañana para realizar una concentración de titulares de licencia de taxi frente al ayuntamiento de Santa Cruz, coincidiendo con la celebración del pleno municipal en el que espera que sean debatidas las demandas del sector.
Peña recuerda que el objetivo de la asociación es defender los intereses generales de todos los taxistas, por eso exigen que se tomen medidas de choque que atenúen la precariedad laboral de los titulares de licencia de taxi, pero también pretenden concienciar al Ayuntamiento e incluso a una parte del colectivo de cuál es el alcance real de la situación de insostenibilidad en la explotación de los taxis arrastrada desde el año 2007.
El líder de UTAT recordó las recientes declaraciones del concejal de Servicios Públicos, Dámaso Arteaga, en las que manifestaba que había tenido acceso a un informe que fijaba el exceso de licencias de taxi en Santa Cruz de Tenerife en 200, un exceso que automáticamente supone un 25 % de pérdida media bruta de la recaudación mínima estimada como necesaria para la sostenibilidad de la actividad en la ciudad, lo que se traduce en que quienes ejercen la profesión se enfrentan a situaciones límite como proporcionar alimentos a la familia y un mantenimiento óptimo de los vehículos, además de afrontar los pagos obligatorios como la seguridad social y otras cargas administrativas que soportan.
Según Carmelo Peña, todo ello sobrevenido por tener que soportar situaciones de intervencionismo arbitrario, sin justificación de interés público, por parte del Ayuntamiento en cuanto a la regulación de la actividad del taxi, tras lo que hizo un llamamiento a la participación masiva de los compañeros taxistas en estas reivindicaciones de la semana que viene, con las que esperan causar el menor trastorno a los usuarios de este servicio de transporte público, clave para la movilidad insular por su flexibilidad y disponibilidad permanente con tarifas reguladas ajustadas a costes reales de explotación, que para colmo siguen sin haber sido actualizadas tampoco a fecha de hoy, dijo el portavoz de UTAT.