Dentro de su estrategia para fomentar el potencial y la comercialización de la empresa y atraer a nuevos clientes, Renfe ha mostrado su disposición a establecer alianzas con las nuevas formas de movilidad y transporte que actualmente están surgiendo.
En base al nuevo concepto de intermodalidad, consistente en servicios combinados, Renfe abre las puertas al ofrecimiento de servicios que combinen al trayecto ferroviario, colaborando con empresas de transporte privado, como son las empresas de alquiler de vehículos con o sin conductor. Esto fue calificado como una “apuesta de futuro” por el presidente de la compañía, Juan Alfaro.
Empresas como Alsa ya han puesto en marcha colaboraciones de este tipo al ofrecer servicios de alquiler de vehículos, con o sin conductor, al comprar un billete para viajar a Madrid.
Juan Alfaro indicó que esta apuesta “potenciará la comercialización de los servicios ferroviarios combinados y favorecerá los acuerdos con otros medios y compañías de transporte”. Es en ese último punto donde podría incluirse, y por ello no fue descartada, la colaboración con Uber.