El Mundial de Fútbol 2014 y los Juegos Olímpicos de 2016 están transformando por completo las principales ciudades brasileñas. El ayuntamiento de Río de Janeiro ve en el trasporte eléctrico el aire de modernidad que la ciudad necesita para estos eventos y ha concedido a Nissan la introducción de dos taxis eléctricos del modelo Leaf.
El periodo de prueba comenzará con dos taxis, pero le seguirá la incorporación de otros 13 a finales de año. Estos vehículos tendrán como base el aeropuerto nacional. Santos Dumont y podrán cargar en 30 minutos hasta ahora en sólo dos puntos de abastecimiento: en Lagoa y Barra da Tijuca, ambos de la compañía petrolera estatal Petrobrás. La autonomía media de este vehículo es de 160 kilómetros.
La firma automovilística explicaba que este proyecto “reafirma nuestra misión mundial para promover una vida más amigable con la naturaleza y el planeta sin comprometer la comodidad de la movilidad urbana”, dijo Manuel de La Guardia, vicepresidente de ventas y marketing de Nissan en Brasil.
Río de Janeiro se plantea reducir las emisiones de CO2 en un 16% para 2016, respecto a las emisiones registradas en 2005. "Con los grandes acontecimientos de los que Río será sede, le damos una mayor visibilidad a los vehículos que funcionan con energía limpia para que se inicie un cambio en los patrones de producción y consumo, con el objetivo de contar con normas sostenibles", declaraba el secretario municipal de Transporte, Carlos Roberto Osório.