Se disparan las sanciones por usar el teléfono mientras se conduce

En los últimos seis años las sanciones por hablar por móvil mientras se conduce han aumentado de 1.500 a 27.000, según un informe elaborado por RACE con datos obtenidos de la DGT. Las ciudades más ‘infractoras’: Madrid y Andalucía.

 

El estudio remarca que en el pasado año 136.800 conductores fueron sancionados por hablar por el móvil y que, entre 2009 y 2012, un total de 141 perdieron el carné de conducir por utilizar el teléfono al volante.

 

Este aumento no sólo pone de manifiesto que este tipo de infracciones han aumentado desde el 2005 en un 18 por ciento, sino que trae consigo peligros para la circulación. El mismo documento señala que las distracciones al volante (entre estas distracciones se encuentra el uso del teléfono móvil mientas se conduce) se han convertido en la primera causa de mortalidad en las carreteras españolas, y provocaron en 2011 la muerte de 649 personas en accidentes de tráfico.

 

El informe arroja que el riesgo se sufrir accidentes se multiplica por cuatro al usar el teléfono móvil porque supone dos momentos de peligro para la circulación: el primero en el que se busca y localiza el terminal y luego la propia conversación. Esta situación, aclara RACE, se equipara con conducir bajo los efectos del alcohol.

 

Para completar el estudio, se elaboró también una encuesta a 1.400 conductos. Se desprende de esta que un 15% de ellos reconoció haber sufrido alguna situación de riesgo y el 16% reconoce haber enviado SMS o correos mientras iban conduciendo.

 

Los consejos básicos que RACE lanza para evitar situaciones de riesgo y conducir con seguridad son no hablar por teléfono mientras se conduce, a no ser con manos libres, evitar las llamadas, así como escribir correos o utilizar el móvil para capturar imágenes o grabar vídeos.