Se congela la entrada de asalariados en Málaga

El Ayuntamiento de Málaga ha bloqueado la entrada de nuevos empleados en el sector del taxi con idea de reducir vehículos de la calle y conseguir que, como mucho, haya un asalariado por vehículo.

 

La modificación de la ordenanza se hará en base al Reglamento andaluz y fijará que la contratación de conductores asalariados dependa de una autorización municipal. La intención a medio plazo es que no haya más de un asalariado por taxi.

                             

De las 1.432 licencias en activo unas 600 son explotadas en exclusiva por el titular, mientras que 669 tienen un único asalariado, dentro de las exigencias marcadas por el Reglamento andaluz. En total, fuentes municipales calculan que pueda haber alrededor de 900 asalariados dentro del sector.

 

Estas mismas fuentes señalaron que el freno a la contratación de asalariados permitirá “un mejor reparto del trabajo”. Sólo afectaría a 130 concesiones que actualmente tienen contratados a dos o más asalariados.

 

Como ventaja a los asalariados que pierdan con esta medida su empleo en Ayuntamiento de Málaga les dará prioridad para comprar las licencias de taxi que vayan quedando libres y incluso estudian con varias entidades financieras la posibilidad de darles facilidades de financiación para la compra.

 

Arturo Kindelán, portavoz del colectivo de trabajadores asalariados en la ciudad, se ha mostrado disconforme con la medida y con la falta de información del Consistorio. Su solución pasaría por crear “una comisión de estudio” entre todos para analizar la situación y ver que medidas tomar sin que haya una parte especialmente perjudicada.

 

Por contra, el presidente de la Asociación Unificada de Autónomos del Taxi (Aumat), José Maté, sí mostró su apoyo a esta media “necesaria” ya que el sector “ha perdido rentabilidad porque hay un excesivo número de asalariados”.