Londres se prepara para los Juegos Olímpicos del próximo mes con iniciativas de todo tipo como la de llegar a transformar un taxi en hotel. Eso es lo que ha hecho con su típico coche negro el taxista David Weekes por el “módico” precio 50 libras/noche. A cambio ofrece al cliente su dilatada experiencia, confortable descanso y privacidad.
(CNNGo) - En las semanas previas a
El taxi está equipado con un colchón de espuma, almohada, edredón, lámpara de noche y un osito de peluche. También está provisto de un pequeño frigorífico que funciona con paneles solares, un radio y una iPad.
Weekes, que espera ganar “unos cientos de libras” gracias a esta iniciativa y ofrecer a los visitantes una verdadera perspectiva local de Londres, solo ha impuesto dos reglas: no se puede fumar y no se aceptan mascotas.
“Estoy ofreciendo la verdadera experiencia londinense. Conozco esta ciudad como la palma de mi mano, así que puedo ofrecer conocimiento que no obtendrías si te hospedases en un cuarto de hotel normal. Definitivamente es diferente; no mucha gente puede decir que ha dormido en un taxi negro”, dijo.
A los huéspedes se les dará privacidad por las noches y deberán recoger sus cosas por la mañana para que Weekes pueda ir a trabajar. El taxi puede estacionarse donde desee el huésped, siempre y cuando sea un área permitida.